CARACAS.-La coalición opositora venezolana, aliada con diversas organizaciones civiles, llamó el jueves a reactivar las acciones de calle para protestar contra las elecciones presidenciales del 20 de mayo y presionar a la comunidad internacional para que no reconozca los comicios.

En un intento por organizar y reactivar a los sectores que están en contra del gobierno del presidente Nicolás Maduro, la alianza de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que agrupa a una veintena de partidos, creó junto con sindicatos de trabajadores, movimientos de universitarios, representantes de las iglesias católica y cristiana y disidentes del oficialismo el llamado «Frente Amplio Venezuela Libre».

Como parte de las primeras medidas, el nuevo frente convocó para el 12 de marzo a una marcha hasta la oficina de la Organización de Naciones Unidas, que funciona en el este de la capital, para exigir a esa instancia que no convalide los comicios de mayo, que la oposición considera como un «fraude».

Asimismo llamaron para el 17 de marzo a una protesta nacional e internacional en rechazo a las elecciones.   El frente también emprenderá acciones ante los diferentes gobiernos y organismos internacionales para lograr que no se reconozca el «proceso fraudulento» convocado para el 20 de mayo, indicó Víctor Márquez, presidente de la asociación de profesores de la estatal Universidad Central de Venezuela, dijo, al leer un comunicado del nuevo bloque opositor.

Desde el fracaso de las manifestaciones antigubernamentales que se realizaron entre abril y julio pasado, que dejaron más 120 fallecidos, y la instalación en agosto de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, los sectores opositores se habían mantenido rezagados y no habían promovido nuevas protestas callejeras.

«Este 2018 los venezolanos tenemos el derecho de elegir un nuevo gobierno como pauta la constitución», afirmó el dirigente político Ramón Guillermo Aveledo al anunciar que la coalición opositora trabajará con las organizaciones de la sociedad civil para lograr que este año se de una «elección de verdad, legítima, confiable» en el país suramericano agobiado por una profunda crisis económica y social.

La MUD acordó el mes pasado no participar en las elecciones presidenciales previstas inicialmente para el 22 de abril alegando que no cumplían las «garantías electorales».

La creación del frente se da una semana después de que organizaciones oficialistas que respaldan la reelección de Maduro y tres partidos minoritarios, que apoyan al candidato independiente Henri Falcón, decidieran como parte de un convenio la postergación de los comicios presidenciales para el 20 de mayo y realizar de manera simultánea las elecciones de consejos legislativos y municipales, cuyos periodos vencieron el año pasado.

El acuerdo también prevé que las partes propondrán al secretario general de ONU la conformación de una delegación de acompañamiento y observación de todas las fases del proceso y se garantizará la equidad en el acceso de los candidatos a los medios públicos y privados de comunicación.