A primeras horas de los últimos días se observa todo un aparataje de miembros de la Policía y del Ejército en algunas vías e intersecciones pidiendo los documentos a muchos conductores de motocicletas y de vehículos.
Estas acciones forman parte del plan preventivo dispuesto para enfrentar la ola delictiva. Sin embargo, en los barrios persisten los asaltos y la falta de patrullaje, con un saldo negativo de muertos y heridos.
Lo que se pide y espera la población es una labor más efectiva en cuanto a inteligencia y persecución de los verdaderos “delincuentes” que están en sectores muy conocidos.