La ONU defendió este lunes que los civiles evacuados de zonas de Ucrania afectadas por los combates deben poder decidir su lugar de destino, después de que Rusia haya anunciado la apertura de corredores humanitarios, pero sólo con destino a su territorio y la vecina Bielorrusia.
“Creo que es importante que la gente pueda ir a donde decida y donde estén seguros”, señaló preguntado al respecto el portavoz de la organización, Stéphane Dujarric.
Rusia ha anunciado un alto el fuego temporal para abrir corredores humanitarios en Kiev (norte), Mariúpol (sureste), Járkov (este) y Sumy (noreste) con seis rutas, de las que cuatro acabarían en ciudades rusas como Rostov del Don (ruta por el sur) y Bélgorod (por el este). El plan de evacuación para Kiev también incluye pasar por territorio de Bielorrusia (Gómel y Gden) con posterior transporte aéreo a Rusia.
La iniciativa ha sido rechazada por el Gobierno ucraniano, considerando “absurdo, cínico e inaceptable” que el destino de los evacuados sea territorio ruso.
La ONU ha discutido en los últimos días con Rusia y con Ucrania su posible apoyo a las evacuaciones de civiles y Dujarric dijo hoy que los contactos con ambas partes continúan.
“Tenemos que garantizar que las personas atrapadas por los combates, que se van para buscar refugio, estén protegidas. Y eso requiere cooperación de la Federación Rusa y de las autoridades ucranianas”, señaló.
En ese sentido, el portavoz anunció que un equipo de la oficina humanitaria de la ONU ha viajado a Moscú para mantener reuniones técnicas con el Ministerio de Defensa ruso con el fin de reforzar la cooperación y el intercambio de información para facilitar la asistencia a la población ucraniana.
Esa fórmula fue acordada el pasado viernes en una reunión entre el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú.
Durante el fin de semana, Guterres se entrevistó también con el titular de Exteriores ucraniano, Dmitro Kuleba, para discutir la evacuación segura de civiles.
Según los últimos datos de Naciones Unidas, al menos 1,73 millones de ucranianos han dejado ya el país como consecuencia de la guerra, de los que un millón han huido a la vecina Polonia. Además, existe un gran número de desplazados internos, aunque la organización ha dicho que no tiene cifras precisas sobre estos últimos.