En días recientes el presidente Abinader dio reinicio a la construcción de una verja perimetral inteligente, mejor conocido como muro fronterizo.

El término inteligente se aplica porque la obra física va acompañada de una serie de sensores y cámaras que permitirá una mejor vigilancia de sus alrededores con el objetivo de impedir el contrabando, trasvase de drogas y el tráfico humano.

La obra, que en su etapa inicial tendrá un costo aproximado de RD$1,750 millones, tiene una extensión de 54 kilómetros e incluye unas 19 torres para cámaras y 10 puertas de acceso.

Se ha informado que paralelamente se habilitarán 54 caminos para el patrullaje.

Pero resulta que, si además del control de la frontera se quiere propiciar el desarrollo social y económico de la región, no basta con un muro.

Tal y como lo han revelado eventos deportivos públicos como es el caso del Rally de la Frontera, celebrado este fin de semana pasada, transitar a lo largo de nuestra línea divisoria entre los dos países vecinos es una verdadera tortura. Si bien existen caminos en buen estado, una gran parte de este está en condiciones exclusivas para vehículos de doble tracción y de gran altura sobre el suelo ya que está en condiciones pésimas para no decir otra cosa.

Para poder aprovechar la ley de incentivo del desarrollo fronterizo es indispensable buenas vías de comunicación que apoyen labores agrícolas y su industrialización, zonas francas, turismo y otras actividades productivas que fortalezcan y sostengan un desarrollo sostenido.

Buenas vías pavimentadas y señalizadas facilitarían el traslado hacia escuelas y hospitales, mejorando con ello la calidad de vida de los lugareños y conteniendo la masiva migración hacia zonas urbanas.

No nos contentemos y limitemos solo con la construcción del llamado muro. Auspiciemos que el mismo sea levantado concomitantemente con obras de infraestructura viales, sanitarias, hídricas y eléctricas, de manera que la tarea de contención e incentivo encuentren un apoyo que pueda traer el desarrollo socioeconómico de la región.