Managua.- Nicaragua comenzará este sábado la campaña con miras a las elecciones generales del 7 de noviembre próximo, en las que el presidente del país, el sandinista Daniel Ortega, busca su quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Ortega, un exguerrillero próximo a cumplir 76 años y en el poder desde el 10 de enero de 2007, arrancará la campaña con siete de los que se perfilaban como sus principales contendientes en la prisión o arresto domiciliar, acusados por la Fiscalía por presunta traición a la patria o lavado de dinero.
El líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) disputará la Presidencia el 7 de noviembre a cinco candidatos de la oposición, incluido el reverendo Guillermo Osorno, del partido Camino Cristiano Nicaragüense, que en los comicios pasados formó parte de la coalición sandinista.
La campaña también arrancará sin tres partidos políticos opositores (Ciudadanos por la Libertad, Partido Restauración Democrática y Partido Conservador), a los que el Consejo Supremo Electoral (CSE) canceló su personalidad jurídica bajo el argumento de que violaron la Ley Electoral.
¿ELECCIONES EN NICARAGUA SIN VALIDEZ?
Canadá, Colombia, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y República Dominicana emitieron esta semana una declaración conjunta en la que aseguran que en Nicaragua no existen las condiciones para unos comicios “libres y justos”, lo cual, advierten, “pone en tela de juicio la validez y legitimidad de las elecciones de noviembre».
“Las medidas adoptadas por el Gobierno de Nicaragua no reúnen las condiciones necesarias para la celebración de elecciones libres y justas, a las que se han comprometido los Estados miembros de la OEA, en virtud de la Carta Democrática Interamericana, lo que pone en tela de juicio la validez y legitimidad de las elecciones de noviembre, tal como se están organizando actualmente”, de acuerdo con la declaración de los ocho países, emitida en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En el actual proceso electoral, las autoridades nicaragüenses han arrestado y acusado a más de una treintena de dirigentes opositores, entre ellos a los aspirantes presidenciales Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora, Medardo Mairena y Noel Vidaurre.
Otros dos políticos de la oposición que anunciaron sus intenciones de aspirar a la Presidencia, María Asunción Moreno y el exlíder de la “Contra” Luis Fley, abandonaron Nicaragua alegando razones de seguridad.
CAMPAÑA “VIRTUAL” POR LA COVID-19
Otra de las novedades de la campaña, que se desarrollará del 25 de septiembre y al 3 de noviembre próximo, es la prohibición de eventos presenciales masivos debido a la pandemia de la covid-19.
El CSE informó este viernes que la campaña electoral, que será la más corta desde 1990, se realizará “en cumplimiento de las medidas sanitarias, de orden y de seguridad dictadas por el Ministerio de Salud”, y no se permitirán caravanas, caminatas o actos en espacios abiertos y públicos con más de 200 personas, para evitar aglomeraciones.
La autoridad electoral ha recomendado a los partidos dar prioridad a los mecanismos de difusión virtuales, para dar a conocer de una manera segura su plan de Gobierno.
Asimismo, de momento las autoridades no han acreditado a ningún organismo de observación electoral. Sectores de la oposición, como la Unidad Nacional Azul y Blanco, han tildado de “farsa” los próximos comicios y pedido a Occidente desconocer sus resultados.
En Nicaragua, un país centroamericano de 6,5 millones de habitantes, unos 4,3 millones están habilitados para votar y elegir presidente y vicepresidente, 90 diputados nacionales y otros 20 ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen).