Todas las personas junto a sus familias anhelan pasar las fiestas de navidad y año nuevo; con felicidad, fraternidad, armonía, convivencia, empatía, solidaridad, esperanza, tolerancia, paz, sinceridad, compartiendo y celebrando en base a la participación de cada integrante de la familia, en la mesa: la cena, desayuno y almuerzo. Todo es deseo de prosperidad y progreso.

La paz y prosperidad es un deseo de la ciudadanía, de las autoridades ejecutivas, congresuales, municipales (según expresiones en los medios de comunicación) en espacios pagados con los impuestos de todos. En fin, del país, de la nación. Todo muy lindo, todo sin violencia y una sociedad de dialogo en toda sus facetas.

Hasta ahí todo anda bien. Pero ocurre que el conflicto no toma vacaciones, no se va de viaje y siempre está en donde hay personas y por ser esa su característica principal, no podemos decir que en estas fiestas del 2017 y el prospero 2018, no ocurrirán conflictos en la familia, comunidad y en el trabajo, en el país.

Nadie está exento. Todos los involucrados en los encuentros de familia podrían tener un conflicto con: padres, hermano/as, tio/as, primo/as, sobrino/as, yerno/as, abuelo/as. En navidad también están los vecinos, amistades y relacionados; quienes hacen posible encuentros fraternales y sociales entre las personas.

Navidad en diciembre, es donde el adviento se hace para reflexionar y organizarse para el próximo año. También, puede ser para entrar con alguien en un conflicto dándose o no cuenta de un suceso.

Ya que los conflictos no tienen preferencias, llegan sin usted estarlos esperando y en momento que usted menos piensa y con la persona que nunca se imagino. Así de sencillo. El conflicto no es una contrariedad, es una oportunidad que nos ofrece la vida para crecer en relaciones sociales más armoniosas y duraderas.

Navidad no está exenta de esa realidad, mucho menos las personas que acuden a las iglesias a confraternar y compartir su fe y creencia con otros de su grupo y clase social.

También en estas fiestas que nos ofrece cada año que termina, nos permite ver otros horizontes, realizar planes a corto, mediano y largo plazo y los conflictos usted no puede descártalos de sus proyectos tanto de vida como de familia.

Es así que Conflictos y Mediaciones en sus 4 años, ha venido planteando puntos de vistas a todas las personas lectoras del periódico “El Día”, en su plataforma digital; gracias a la oportunidad que nos ha facilitado el Grupo de Comunicaciones Corripio, presidido por el empresario de origen español, José Luis Corripio Estrado, persona de bien.

Conflictos y Mediaciones espera de la ciudadanía para este 2018, que los conflictos sean abordados mediante métodos alternativos y participativos como la mediación.

Conflictos y Mediaciones es de opinión y de otros actores preocupados por la ola de violencia contra la mujer, las personas menores de edad y adultos mayores que este 2018 sea un año de cambio de paradigma en relación a los conflictos de las personas.

Es hora de ponerle un fin definitivo a la violencia, solo tú, yo y los míos y los tuyos tenemos la oportunidad de ser la diferencia.

Feliz 2018. Te esperamos con ansías de hacer los cambios y de respetar la diversidad en la sociedad. Estamos en nuestras propias manos.

Recuerde el conflicto es inherente a la persona, manos a la obra 2018. Chao.