Bisara.- La policía arrestó a ocho personas y busca a otras dos después que una turba presuntamente mató a golpes a un campesino musulmán e hirió de gravedad a su hijo al escuchar rumores de que la familia comía carne de res, lo que es tabú para muchos entre la población mayoritaria hindú, se informó el miércoles.
La turba de unos 60 hindúes se enfureció cuando un templo anunció que la familia mataba reses y almacenaba la carne en su casa en Bisara, una aldea 45 kilómetros al sureste de Nueva Delhi, la capital, dijo el magistrado distrital Nagendra Pratap Singh.
Añadió que la gente sacó a Mohammad Akhlaq, de 52 años, y su hijo de la casa el lunes por la noche y los golpeó con palos y ladrillos. Akhlaq fue declarado muerto en un hospital vecino, en tanto su hijo recibe tratamiento por lesiones graves.
Desde que el primer ministro Narendra Modi, un nacionalista hindú, asumió el año pasado, los hindúes más intransigentes exigen que se prohíba la venta de carne de res, una fuente de ingresos crucial para muchos pobres de la minoría musulmana.
En muchos estados la matanza de reses y la venta de su carne están prohibidas o sujetas a fuertes restricciones. En el hinduismo la vaca es un animal sagrado y es frecuente ver a los animales deambular sin control por los barrios de las grandes ciudades y las autopistas.
El legislador opositor Shashi Tharoor tuiteó que la “horrenda matanza demuestra que los prejuicios por la carne escapan a todo control” y que los indios deben tener la “libertad de comer lo que quieran”.
Mientras, reina una fuerte tensión en la aldea, donde casi el 40% de los 1.500 habitantes son musulmanes, desde que algunos hindúes denunciaron la desaparición de vacas y búfalos, dijo Singh.
El miércoles, la policía patrullaba la aldea, donde la mayoría de la gente estaba sentada en las puertas de sus casas. Cuando la policía arrestó a los sospechosos el martes, un grupo atacó a los agentes y sus vehículos, lo que les obligó a hacer fuego, según la prensa local.
Un hombre de 20 años aparentemente sufrió heridas, dijo el diario Indian Express sin entrar en detalles. Los ocho presos fueron acusados de homicidio y disturbios, dijo Singh. La policía buscaba a otros dos sospechosos.