Sídney (Australia).- El primer ministro australiano, Scott Morrison, dijo este martes que no abordará con el presidente francés, Emmanuel Macron, el espinoso asunto de la cancelación del programa para la construcción de submarinos con Francia, en el marco de la celebración esta semana de la Asamblea General de la ONU.
“No es la oportunidad para eso ahora. Estoy seguro que esa oportunidad llegará en su momento”, dijo Morrison a su llegada a Nueva York en referencia al malestar de Francia por la repentina cancelación del contrato que París calificó de “traición” y que motivó la llamada a consultas de su embajador en Australia y EEUU.
La cancelación del contrato con la empresa francesa Naval Group, valorado en unos 65.151 millones de dólares o 55.611 millones de euros, se conoció tras el anuncio la semana pasada de un acuerdo de defensa entre Estados Unidos, Australia y Reino Unido, conocido como AUKUS, que incluye el desarrollo de submarinos nucleares en el país oceánico.
La postura del mandatario australiano, quien afirmó que su país “será paciente” frente a Francia, contrasta con la del presidente estadounidense, Joe Biden, quien pidió hablar con Macron, sobre este contencioso.
Tras subrayar que “hubiera sido ingenuo pensar que una decisión de esta naturaleza no iba a causar decepción»; Morrison señaló que su Gobierno se comunicará con los líderes europeos y de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), especialmente para explicar el AUKUS y asuntos vinculados a la no proliferación de armas nucleares.
Algunos países como Malasia e Indonesia han mostrado su malestar por el AUKUS al considerar que provocará que otras potencias actúen de manera más agresiva en la región, especialmente en el conflictivo mar de China Meridional, mientras que Pekín considera que socaba la estabilidad de la región Indopacífico.
Asimismo, Morrison se mostró confiado en que la cancelación del programa de submarinos no afectará a las negociaciones del tratado de libre comercio con la Unión Europea, después de que el alto representante para la Política Exterior del bloque, Josep Borrell, y la ministra australiana de Exteriores, Marise Payne, acordaran “trabajar para superar los desafíos».
“Estos asuntos se arreglarán en las semanas y meses que vienen. Quiero decir que no es fácil lograr un acuerdo comercial con la Unión Europea”, precisó el mandatario australiano quien se reunirá con líderes europeos en esta gira en la que también dialogará con sus socios de la alianza informal QUAD, que integran Estados Unidos, Japón e India.