El exalcalde de Bayaguana estaba condenado a 20 años de prisión por el asesinato de Castillo Hernández, ocurrido en 2014.
SANTO DOMINGO.- El Ministerio Público interpuso un recurso de casación en el Departamento Judicial de Santo Domingo en contra de la decisión que descarga a Nelson Osvaldo Sosa Marte, alias Opi, exalcalde de Bayaguana, imputado por la autoría intelectual del asesinato del regidor Renato de Jesús Castillo Hernández.
El recurso interpuesto por el Ministerio Público solicita la anulación de la decisión emitida por la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de Santo Domingo, que dispuso el descargo de Sosa Marte, quien estaba condenado a 20 años de prisión por el asesinato de Castillo Hernández, ocurrido en 2014.
El recurso presentado por el procurador general de la Corte Regional de la Provincia Santo Domingo, Francisco Alberto Berroa Hiciano, solicita que Sosa Marte, quien se encuentra en libertad, sea apresado y que cumpla con la condena de 20 años que le fue impuesta el 8 de abril de 2021, como autor intelectual de la muerte del regidor.
“Estamos solicitando a la Suprema Corte de Justicia que dicte sentencia propia y que se ejecute la sentencia emitida en primera instancia por el Tribunal Colegiado de Monte Plata”, dijo.
Castillo Hernández fue ultimado en junio de 2014, cuando se encontraba frente a un colmado de su localidad. Sus atacantes, que se movilizaron a bordo de una motocicleta, lo impactaron con disparos en el tórax y en un brazo.
Durante el juicio de primera instancia, el Ministerio Público demostró la participación intelectual del exalcalde en la muerte del regidor, quien para entonces fungía como presidente de la Sala Capitular de la Alcaldía de Bayaguana.
Por el crimen, también fueron sentenciados a 20 años de prisión Antonio Rafael Olivo Javier (Eladio) y Fredy Alberto de la Cruz, en tanto Marcial Cuello Soto (Prieto) y Yolkis Severino Alberto (Coqui) recibieron condenas de 30 años, por su participación material en el hecho.
También, Dauris de la Cruz (Dawri) fue condenado a 10 años de prisión, mientras que Michael Peña Bueno fue favorecido con absolución por insuficiencia de pruebas.