Santo Domingo.- El exdiputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Miguel Gutiérrez, cedió a la fiscalía general de Estados Unidos el control total de su caso, renunciando a todos sus derechos y quedándose a la vez, sin garantías de que una recomendación de reducción de condena se haga efectiva.

En el acuerdo firmado entre las partes, se hace constar que Gutiérrez renuncia a su derecho de ser acusado formalmente a sabiendas, de que la condena será dictada por un tribunal después de considerar los hechos lo que no le garantiza un periodo en reclusión determinado previamente.

Se indica que el Gobierno calculará una sentencia consultiva, basada en los resultados de la investigación realizada por el tribunal de libertad condicional, proceso que inicia luego de presentar la declaratoria de culpabilidad.

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Igualmente, el tribunal que asuma el caso podrá apartarse del procedimiento consultivo pudiendo variar la sentencia final incrementando o reduciendo según le pareciere.

Es decir, está obligado a considerar las directrices del acuerdo pero no obligado a imponer una sentencia dentro de ese rango de asesoramiento, pudiendo adaptarla.

Entre las posibilidades de sentencia, por el cargo de tráfico de drogas, Gutiérrez podría ser condenado a cadena perpetua y/o una pena mínima de diez años de prisión seguida de una pena de libertad supervisada de al menos cinco años y hasta por el resto de su vida.

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Para el cargo de lavado de activos, la pena probable sería de diez años y al menos tres años de libertad condicional.

Entre ambos cargos, el Tribunal puede imponer una multa de US $10 millones, 500 mil.

Además de las multas, Gutiérrez deberá pagar las evaluaciones especiales que se le realizarán cada una de ellas por un monto de 200 dólares. En caso de que no pueda pagarla, deberá presentar pruebas.