Santo Domingo.– El presidente Danilo Medina instruyó a los responsables relacionados con el Plan de Regularización de Extranjeros a proceder con lo que establece la ley de Migración en torno a las personas que residen de manera ilegal en República Dominicana, pero tomando en cuenta que “se trata de personas, seres humanos que tienen una dignidad y derechos que deben ser respetados”, según explicó a EL DÍA un funcionario vinculado al proceso.
Las primeras acciones acometidas por la Dirección General de Migración (DGM) luego que el Mandatario autorizara el reinicio de las repatriaciones de los extranjeros que no regularizaron su estatus migratorio han sido evaluadas por las autoridades como apegadas al plan de acción diseñado al respecto.
Migración ha optado por no ofrecer explicaciones sobre sus estrategias y sus voceros han dicho que se está haciendo lo que fija la Ley y se procede siguiendo las pautas que constan en un documento de la entidad entregado a los medios de comunicación y a los funcionarios internacionales.
La fuente explicó a EL DÍA que tal como anunció la Dirección de Migración en junio pasado, el procedimiento diseñado para el “proceso de interdicción” a extranjeros indocumentados, como se llama técnicamente la detención de personas en estatus irregular, está a cargo de un cuerpo de inspectores de la DGM especialmente capacitados para esta tarea, incluso “en la delicada cuestión de los derechos de los migrantes”, labor en la que tienen apoyo de personal militar o policial también capacitado, pero –se insistió- es el inspector quien fiscaliza y dirige la actividad.
El procedimiento establece que a la persona sujeta a la investigación se le pide su documento de identidad y el inspector a cargo es quien evalúa la calidad de la identificación entregada y cuestiona al extranjero que se presume en situación irregular. El documento es validado en el mismo lugar, ya que tiene a su disposición equipos que le permiten consultar la base de datos de Migración.
Si el investigado aparece registrado correctamente puede seguir su camino, si existe alguna incoherencia o no tiene documentación es llevado al centro de acogida de Migración más cercano (en el caso de Santo Domingo, el Vacacional de Haina) y allí es interrogado, se chequea el caso detenidamente y puede explicar su situación, hacer una llamada telefónica para contactar amigos o familiares que pueden traerle la documentación regular que no tiene en su poder.
Comprobado el caso en que se justifica la repatriación, se explicó, se registran todos los datos biométricos de la persona y se prepara un expediente para cada caso y este es remitido al Ministerio de Relaciones Exteriores, que se ocupa de contactar a los representantes del país del cual es ciudadano. En el caso de haitianos, se contacta al Gobierno de Haití, y cumplido este requisito la persona es conducida al puesto fronterizo escogido, donde se entrega a las autoridades haitianas el expediente y el repatriado.
Centro de Acogida tiene personal preparado
Las autoridades gubernamentales consultadas ayer por EL DÍA aseguran que en el centro de acogida existe personal profesional para llevar el proceso (equipo de la Dirección de Migración, intérpretes, abogados, personal médico y otros), y a los ciudadanos de Haití se les transporta en vehículos adecuados, haciendo un alto en el trayecto y ofreciéndoles las condiciones básicas. La entrega a las autoridades haitianas se hace en horas y días laborables.
“Las del viernes y las de hoy (ayer lunes) son las primeras dos actuaciones, pero los equipos de Migración han tenido un comportamiento impecable y eso es fundamental para la imagen del Gobierno ante los medios de comunicación y las organizaciones internacionales que tienen su mirada puesta en el país”, dijo un funcionario de Migración que habló a condición de no ser identificado, cuando se pidió información sobre los acontecimientos.
El Gobierno había suspendido las repatriaciones de los extranjeros en situación migratoria irregular por más de 18 meses para dar paso al Plan Nacional de Regularización.
