Orlando el Potro junto a su hija apodada la Muñequita.
Santo Domingo.-En la historia del merengue típico, muchos de sus exponentes provienen de familias ligadas a la música de ‘tierra adentro’ y estos le han traspasado el talento a hijos y a otras generaciones. Padres e hijos se mantienen activos y compiten en la cartelera musical.
Con el género, los merengueros han dado posteridad a transferirles el arte a sus vástagos y ejemplo de lo expuesto es el maestro Rafelito Román con sus hijos Raúl y Nixon, los tres ejecutan el acordeón y comparten escenario y facetas con el ADN musical de esa familia que es una dinastía del merengue típico.
La destacada María Díaz la Reyna, una de las primeras mujeres en interpretan la música autóctona, su arte se ve reflejado en su hijo el joven percusionista Bralen Robles y líder del Grupo D’ Ahora, Bebé Drums o Bebé Tambora, el cual procreó junto al legendario tamborero Juan Robles “el Viejo Puro”, quien descolló en la agrupación del Ciego de Nagua.
Agradecido
“Yo le doy gracias a Dios, por darme un hijo que ha seguido mi camino musicalmente hablando, aunque diferimos en algunas cosas.
Lupe Valerio junto a su hija.
“Me siento orgullo de que Bralen haya seguido mi trayectoria como músico-tamborero y líder en la música típica”, afirmó el
Asimismo, Vinicio López, el cantante ‘derecho’ de Banda Real, también tiene dos hijos en el llamado ‘perico ripiao’, son los Hermanos López (nombres).
Lupe Valerio
El Hombre Acordeón, Lupe Valerio, es un maestro de la música típica que ha formado a jóvenes de manera independiente y a través de la Escuela Ñico Lora. Desde hace un tiempo sus hijos le acompañan en la agrupación y su hija la acordeonista Ruvali Valerio se lanzó al ruedo artístico con su propio grupo y hasta comparte escenario con su progenitor.
“Ella está muy entusiasmada con la música típica y yo la voy ayudar hasta lo último”, dijo el músico y formador de notables acordeonistas.
Otro merenguero que aporta a la continuidad del ritmo, que data desde 1870, lo es Ramón Martínez, director de la Escuela Perico Ripiao, con fuerte genes musicales que se evidencia en Yocaira Martínez (la Doncella del Acordeón), quien ejecuta el instrumento, imparte docencia y es autora de un manual de música. Ambos comparten todas las facetas y los escenarios.
El Viejo Puro y su hijo Bebé Tambora.
“Yo me siento orgulloso de mi hija y de los logros que ha obtenido con el merengue típico”, indicó el acordeonista.
El Potro
Saxofonista y maestro de música típica Mariano Hernández `el Potro`, su estilo inconfundible, también lo extendió a sus vástagos Rolanyi Hernández ’la Muñeca Típica’ y Orlandito Sax; “me llena de mucha satisfacción que dos de mis cuatro hijos siguieran mis pasos y me siento bien, porque dejará descendencia en nuestra música”.
Además, expresó que le ha enseñado las técnicas y los valores que le han dado resultado como es el esfuerzo, la entrega y la capacitación musical.
Diferente La India
Mery Hernández conocida como “la India Canela” es una merenguera con gran trayectoria, tanto como intérprete y acordeonista. Su hija Esmeralda siguió los pasos en la música, pero en género diferente, ya que es una exponente urbana.
En el pasado
Francisco García Henríquez, el icónico nagüero y una de las figuras del merengue Tatico Henríquez, heredó de su padre Juan- Bolo -Henríquez, quien lo formó musicalmente. Tatico le extendió su arte a su hijo Fari.
Se mantiene
Ramón Martínez y su hija la Doncella del Acordeón.
— Relevo
El merengue típico ha conseguido llevar relevos a la música y esto lo mantiene vivo e innovando, que es lo que le falta a otros ritmos musicales como la bachata y el merengue que carecen de ello.
