PARÍS.-Setenta y un periodistas murieron en 2013 durante el ejercicio de su profesión, lo que supone una disminución respecto al año anterior, aunque esta vino acompañada de un aumento «importante» de secuestros, según el balance oficial de Reporteros Sin Fronteras (RSF).
El informe de 2013 representa una reducción del 20% respecto a los 88 periodistas fallecidos en 2012, aunque sigue siendo «un nivel elevado», según RSF.
«Siria, Somalia y Pakistán se afianzan como los cinco países más mortíferos para la profesión», indica RSF en su balance anual.
«Este año se les une India y Filipinas, que sustituyen a México y Brasil», añade. Los 71 periodistas fallecidos este año eran en su gran mayoría hombres (96%), que trabajaban principalmente en la prensa escrita (37%), antes que en la televisión o la radio (30%, en ambos casos), o que en plataformas en línea (3%).
La organización subraya que el año estuvo marcado por un fuerte aumento de los secuestros a periodistas, con 87, frente a los 38 de 2012, en su mayoría en países de Oriente Medio y el Norte de África (71), seguidos del África subsahariana (11). Según RSF, 49 periodistas fueron secuestrados en Siria en 2013, y 14 en Libia. R
SF da cuenta también de «al menos 178 periodistas presos» actualmente en el mundo. «China, Eritrea, Turquía, Irán y Siria siguen siendo, como en 2012, los cinco principales» países por número de periodistas encarcelados.
Por su parte, el Comité para la Protección de los Periodistas (CJP, por sus siglas en inglés), una ONG con sede en Nueva York, subraya que Turquía vuelve a ser el país que condena a prisión a más periodistas, seguido de cerca por Irán y China.
El CPJ, que da cifras diferentes a las de RSF, dice que una treintena de periodistas extranjeros fueron secuestrados en Siria desde el inicio del conflicto, entre ellos los estadounidenses Austin Tice y James Foley; los franceses Didier François, Edouard Elias, Nicolas Hénin y Pierre Torrès; y los españoles Javier Espinosa y Ricardo García Vilanova