Santo Domingo.-Las mellizas Altagracia y María Aquino Montaño afirmaron ayer que dedicaran su vida a pasear por el país, luego de pasar más de 30 años como profesoras en varias escuelas de Santo Domingo.

“Estamos jubiladas y vamos a descansar, andar y estar donde nos sintamos bien”, expresó María mientras era respaldada por su hermana.

Aclaran desaparición

Ambas saltaron a la luz pública tras haber sido reportadas como desaparecidas por parte de sus familiares.
Sin embargo, las hermanas aclararon ayer que nunca esa ha sido su condición.

De 56 años de edad, se autodefinieron como personas independientes que están buscando otro “aire” en su vida.
Ninguna de las dos se ha casado ni tienen hijos y “siempre” han estado juntas.

“No tenemos ningún compromiso y siempre salimos y entramos sin avisar, porque somos adultas, entonces no tenemos porqué estar avisando que vamos aquí o allí y nunca lo hemos hecho realmente”, reiteró Altagracia.

Con un estilo muy peculiar y tono pausado, afirmaron que desde que se enteraron de la noticia llamaron a sus familiares para avisarles que estaban bien.

“Estamos muy sorprendidas, porque no pensábamos que se iba a armar todo este alboroto”, expresaron.
La desaparición de las hermanas fue denunciada desde principios de este mes por sus parientes.

Hermanos, primos y demás mostraron preocupación por la decisión que tomaron las dos hermanas asegurando que nunca se habían separado así de ellos.

Infancia en la normalidad

“Nuestros padres fueron muy cariñosos con nosotras y nos brindaron una buena infancia”, especificó María, para explicar que su niñez transcurrió en normalidad en la capital.

Las mellizas tienen cinco hermanos y sus padres fallecieron en 2008 y 2011. Anteriormente eran vecinas de tres hermanas en Los Jardines del Ozama, pero hace unos meses se mudaron a Lucerna y de ahí no se supo más de ellas hasta ayer.

Afirmaron que no tienen problemas con sus parientes, y lo que han tomado es una decisión “como cualquier adulto”. Ninguna quiso expresar públicamente dónde residirán.

Parientes les piden una reunión familiar

Minutos después de que las mellizas visitaran la redacción de EL DÍA llegaron a este diario algunos de sus parientes, quienes les pidieron que busquen a sus hermanos.

Los familiares de Altagracia y María agradecieron que ambas hayan aparecido sanas y salvas y que no les hubiera pasado nada malo.

“Para nosotros es extraño que ellas no esperaran a ningún familiar que viniera hasta aquí. Lo que les pedimos es que se haga una reunión familiar y que hablemos”, manifestó Yina Navarro, una de las parientes. Negó que las mellizas sufrieran de depresión.

“Pese a todo les damos las gracias a Dios porque ellas se encuentran bien, aunque nos gustaría que se reunieran con nosotros”, manifestó.