Santo Domingo. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, presentó el “Informe de Línea Base sobre el Estado de Especies Marinas”, con el objetivo de crear estrategias que ayuden a conservar los arrecifes coralinos y la población de peces herbívoros, en especial los peces loros, doctores, cirujanos, ángeles, mariposas y pepinos de mar.

Este informe fue presentado al presidente de la República, Luis Abinader, en cumplimiento del Decreto 418-21, del 2 de julio de 2021, que prohíbe además la pesca de varias especies marinas hasta el 2023.

El informe dado a conocer por el ministro Orlando Jorge Mera, contiene una investigación ejecutada a través del Viceministerio de Recursos Costeros y Marinos, en nueve provincias costeras. Estas son San Pedro de Macorís, San Cristóbal, Peravia, Azua, Barahona, Samaná, Puerto Plata, Monte Cristi y La Altagracia.

“Esta investigación busca la preservación de los peces herbívoros que juegan un rol fundamental en la salud marina, limpiando las algas que les quitan luz y oxígeno a los arrecifes del coral, un papel fundamental en el equilibrio ecológico y su sobrevivencia”, explicó el ministro de Medio Ambiente.

Hallazgos de la investigación.

El estudio realizado por técnicos del Ministerio de Medio Ambiente determinó la presencia de 4,563 peces de las diferentes especies. 2,911 de la familia de Scaridae, en las que están los peces loro, jabón, butú, cotorra; 1,512 Acanthuridae, pertenecientes a peces doctores y cirujanos; 5 Pomacanthidae, peces ángeles y 135 Chaetodontidae, de peces mariposas.

Comprobando que en las zonas evaluadas los recursos acuáticos vivos y la pesca se encuentran en una difícil situación, al igual que los arrecifes que presentan en general una condición de deterioro, pasando de un estado con predominio de corales, a otro en que la presencia de algas carnosas es predominante.

Las especies que contribuyen más a la diversidad por su abundancia, por provincias, están incluidas en la familia Scaridae, con un 72.9 % en San Pedro de Macorís, un 63.01 % en Peravia, un 63.26 % en Barahona y un 66.21 % en Azua.

Sin embargo, para la provincia San Cristóbal predominan las especies doctores y cirujanos con una diversidad de 84.93 %.

Las especies que más contribuyen a la diversidad por su abundancia en las provincias de la costa norte con un 80.75 % son peces loro, jabón, butú, cotorra. En Montectristi habitan un 63.01 % y en Samaná un 76.78 %.

Mientras, para la provincia de Puerto Plata los valores son semejantes en porcentaje para las dos familias principales Scaride y peces doctores y cirujanos con un 47.2 % y 50.43 % respectivamente.

El estudio comprobó que la disminución significativa en la población de peces es producto de la sobrepesca de individuos adultos, alterando el delicado equilibrio de los ecosistemas de coral. Es decir que entre los grupos de peces evaluados predominan los individuos de menos de 10 cms., considerados juveniles, reflejando con esto un impacto directo de la pérdida de individuos pre-adultos y de adultos. En general existen porcentajes diferentes entre el número de juveniles, con un 60.77% y de pre-adultos / adultos con 39.23% dentro de cada familia.

“Algunos investigadores sugieren que los herbívoros de pequeña talla son menos eficientes en el control de las algas carnosas grandes, y producen mayor número de mordiscos sobre los corales, lo que podría contribuir al deterioro de estos. Ciertos estudios indican que, en arrecifes degradados, los juveniles de peces loro, pueden contribuir con el consumo de algas principalmente algas césped, con lo contribuirían a ayudar el establecimiento de nuevos reclutas de corales en el arrecife”, dice el estudio.

Recomendaciones

Los técnicos del Viceministerio de Recursos Costeros y Marinos en el cumplimiento de lo establecido en el decreto 418-21, realizaron diversas recomendaciones para la preservación de estos peces herbívoros y así evitar la sobrepesca que es constante en estas nueve provincias.

Algunas de estas recomendaciones establecen crear sistemas de administración pesquera para conseguir una gestión responsable y eficaz que asegure la mejoría y sostenibilidad de la explotación de los recursos acuáticos.

Además, elaborar planes conjuntos interinstitucionales de aplicación de veda que sean sostenibles, beneficien el ecosistema y a los actores de pesca. De igual forma, promover y establecer alternativas a la pesca en arrecifes.

Asimismo, establecen que se necesita apoyar a las instituciones del Estado designadas para llevar a cabo los programas de monitoreo del estado del recurso, las actividades de comercialización de las especies bajo el régimen de veda y la fiscalización y cumplimiento de la misma.

Otra de las recomendaciones es promover efectivamente la educación de los pescadores y consumidores locales, para que comprendieran por qué estas especies deben ser protegidas.