Los candidatos presidenciales darán treguas y se tomarán su receso antes de reanudar la fase final de la campaña, pero los candidatos a cargos municipales no tienen pensado hacer lo propio, pues para ellos el tiempo apremia.
Aunque bajen la cabeza durante Navidad y Año Nuevo para eludir a los “pica picas” y a los “dame lo mío”, tendrán que mantenerse trabajando arduamente en la elaboración de propuestas, consolidación de equipos, diseño de estrategia electoral, amarres con munícipes de influencia y, especialmente, despertado el interés en el electorado.
Período accidentado
En el lenguaje político dominicano se tendrá que incorporar el término “argoritmo” o “código fuente” pues fueron palabras que estuvieron muy presentes en los cuestionamientos al proceso de primarias que se celebró en octubre pasado.
El período post primarias fue intenso y sus efectos amenazan con hacerse sentir aún durante las elecciones presidenciales de mayo, opacando así los comicios municipales de febrero y los congresionales que serán simultáneos con los presidenciales.
Colindancias
Las colindancias sociales o familiares son de las características del pueblo dominicano. Difícilmente encontrar a alguien que no sea familia, compadre, socio o amigo. Esa dificultad está presentándose en la escogencia de firmas para auditar los procesos de la Junta.