Más de medio siglo tiene el club, que hoy día se ha convertido en todo un complejo que beneficia a la comunidad y áreas aledañas. Elieser Tapia
Santo Domingo.-Lo que empezó hace 61 años con una canchita en un solar vacío y una escuelita en el sector de Villa Juana, hoy día es un gran complejo que pudiera replicarse en otras provincias del país. Así es el Club Deportivo y Cultural Mauricio Báez.
Este espacio nació un 11 de septiembre de 1963 con el objetivo de ofrecer a los niños, adolescentes y jóvenes de diversas edades, actividades deportivas.
Sin embargo, su constante evolución le ha llevado abarcar la rama de cultural, espacio para formación técnica y tecnológica, las cuales varían durante todo el año.
El exjugador y entrenador de basquetbol, José Domínguez, cariñosamente “Boyón”, cuenta que el fomento de este tipo de actividades mantiene a los “muchachos haciendo ejercicios, siendo productivos. Una persona que hace deportes no tiene tiempo para el ocio”.
Relata, además, que tienen proyectos que van desde los grupos de danza, musicales, pintura, voleibol, judo y básquet, entre otros, que van diseñándose según las necesidades.
A esto se le suma que desde el club también está la parte educativa, ya que cuenta con una escuela y el liceo. Y dentro de la fundación hay un dispensario médico.
El también presidente del club señala que, gracias a la integración de los comunitarios de esa zona, han logrado que este proyecto siga siendo sostenible en el tiempo y que pueda seguir ampliándose.
Refirió que estos espacios dentro de la comunidad contribuyen al desarrollo del deporte, la educación, la salud y las artes; por eso es de suma importancia que “los clubes comprendan que ellos son el motor y la clave en el desarrollo de cualquier sector, sean en la capital o en las provincias”.
Leo Corporán, asesor y presidente fundador, al tender una mirada retrospectiva sobre estos 61 años desde la fundación del club, expresa su asombro por todo lo que han logrado.
Al mismo tiempo, manifiesta que le queda el dolor de que aquellos grandes promotores de esta iniciativa, como fueron Deli Manuel Doñé, Annerys Pozo, Julio Pozo, José Heredia, José Martínez y otros más, fallecieron sin ver hoy este modelo que sigue impactando a los jóvenes.
Al igual que Domínguez, cree que este tipo de modelo de club se puede replicar en otras comunidades.
“Es mucho esfuerzo, tanto en el club como en la fundación, los dirigentes lo hacen por amor a la sociedad y su comunidad”, dice.
En la actualidad trabajan para lograr una emergencia pediátrica 24 horas al día en la misma zona donde está el club. Otro pendiente es el comedor, para lo cual adquirieron un solar, pero no han logrado apoyo por parte del presente Gobierno para que los estudiantes y los munícipes se puedan beneficiar de esa obra.
Tradición
— El desayuno
El tradicional desayuno que realiza el club se lo dedicará al doctor José Joaquín Puello Herrera. El mismo se celebrará en el barrio de Villa Juana, el miércoles 11 de septiembre, a partir de las 7:30 de la mañana.