Santo Domingo.- El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, informó ayer que más de 84 mil indocumentados, de los 288,466 que se inscribieron en el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, han retirado sus carnés de las diversas oficinas de la Dirección de Migración.

Explicó que los carnés de unos 239 o 210 mil extranjeros, de los inscritos durante los 18 meses que duró el proceso, ya están listos y solo falta que los pasen a buscar por las oficinas. Aclaró que los 84 mil carnés entregados no incluyen otros mil que se entregarían ayer a trabajadores agrícolas en Valverde, Mao.

“Estamos hablando que de 239 o 210 mil, que creo que va a terminar por ahí, ya nos quedan prácticamente 115 o 110 mil, pero están todos hechos. Están los carnés y los tiques para los pasaportes, el problema es la fila. Estamos trabajando todos los días y a las tres de la tarde vemos que disminuye, pero ustedes están viendo como ha sido el flujo, o sea, que el Plan ha sido exitoso y ha cumplido con sus objetivos”, explicó.

Consideró que hay más tranquilidad frente al problema migratorio en la República Dominicana, aun cuando se están aplicando las políticas migratorias “como deben de aplicarse”.

Repatriaciones continúan

Fadul sostuvo que las repatriaciones de indocumentados no se han detenido, no porque haya un plan de deportación, sino porque se están aplicando las políticas migratorias del país.

El funcionario dio garantías de que el proceso se hace respetando los derechos de los indocumentados, porque “no se trata de una cacería de brujas, no es una persecución, ni tampoco una política de xenofobia”. Las deportaciones empezaron el día 14 de agosto. “No tengo las cifras exactas de la cantidad de deportados, pero no es una cacería de brujas, no es una persecución, tampoco una política de xenofobia ni mucho menos. Pero estamos aplicando nuestras leyes gradualmente, deportándolos en la medida que se va produciendo, en que uno encuentra a las personas que están de manera irregular”, dijo.

Bandas criminales en la Policía

El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, negó ayer que existan bandas criminales dentro de la Policía Nacional y aseguró que la institución del orden no está podrida, aunque puedan aparecer personas que cometan hechos irregulares.

Consideró que dentro de 35 mil miembros pueden aparecer elementos antisociales, al igual que en cualquier otra profesión que agrupe a miles de personas, pero que se están tomando las medidas correspondientes “sacándolos del cuerpo policial y sometiéndolos a la Justicia”.

Pidió a los legisladores que aprueben el proyecto de ley de Reforma policial que tiene tres años.