Los precandidatos demócratas a la presidencia de Estados Unidos no se ponen de acuerdo sobre si la marihuana debe legalizarse y eso ha sido un tema central en los debates televisivos.
Joe Biden, quien lidera por el momento la carrera demócrata, no termina de estar convencido. Quiere más evidencias sobre si el cannabis puede convertirse en «la puerta» al consumo de drogas más fuertes antes de que se legalice en el país norteamericano.
«Antes de legalizarla a nivel nacional, quiero asegurarme de que sabemos mucho más sobre lo que dice la ciencia», señaló Biden.
Sin embargo, otros demócratas como Cory Booker o Kamala Harris pusieron en duda esa postura, subrayando que la evidencia científica es clara y que debería legalizarse el consumo de cannabis.
r Booker bromeó diciendo que pensaba que Biden «debía estar colocado» cuando se opuso a la legalización.
Y la senadora Kamala Harris dijo que, «siendo claros, las marihuana no es una droga que funcione como puerta a otras y debe ser legalizada».
Otros aspirantes a la candidatura presidencial demócrata como Bernie Sanders o Elizabeth Warren también apoyaron la legalización.
Una encuesta llevada a cabo por el centro de investigaciones estadounidense Pew reflejó que el apoyo público a la legalización aumentó de forma continuada en la última década, con dos tercios de estadounidenses aprobándola.
¿Y qué dice la ciencia sobre esto?
Un total de 33 estados en EE.UU. han legalizado el uso médico del cannabis, mientras que otros 11 estados y Washington D.C. también han permitido el uso recreacional.
Sin embargo, el consumo de marihuana sigue siendo ilegal a nivel federal.
¿Puede entonces la legalización del cannabis conducir al uso de sustancias más nocivas?
El Instituto Nacional de Abuso de Drogas del gobierno de EE.UU. declara que «algunas investigaciones apuntan a que el uso de marihuana es probable que induzca al uso de otras sustancias lícitas e ilícitas».
Esta institución cita un experimento con animales que muestra cómo aumentaron su respuesta a otras drogas después de ser expuestos a algunas sustancias que contenían marihuana.
Pero dicho estudio añade que no solo el cannabis provoca este efecto, también lo hacen el alcohol y la nicotina. Además, afirma que la mayoría de personas que consumen marihuana no usan sustancias «más fuertes».
Denise Kandel, de la Escuela de Salud Pública Mailman, perteneciente a la Universidad de Columbia en Nueva York, dice que la investigación de animales muestra cambios en la forma en la que sus cerebros responden a la cocaína después de ser expuestos al alcohol, la marihuana o la nicotina.
«No es posible establecer una clara conexión entre el uso de marihuana y otras drogas porque hay otros tantos factores contribuyendo que no se pueden controlar en las investigaciones», precisó Kandel.
Por otra parte, la revista médica estadounidense American Journal of Drug and Alcohol Abuse señala que «la evidencia sobre si la liberalización del cannabis tiene un impacto en el uso de otras drogas es inconclusa. Tenemos pocas pruebas sobre si el consumo de alcohol o tabaco también ha sufrido ese impacto».
¿Qué ha pasado en los estados en los que se ha legalizado la marihuana?
Existen pruebas de que en los estados donde se ha legalizado la marihuana el uso de drogas entre los adolescentes ha disminuido o se ha mantenido en los mismos niveles.
Aunque las investigaciones también indican que la legalización de la marihuana conduce a un mayor consumo en los adultos de 26 años o más.
Y recientemente otras investigaciones vinculan el consumo regular de altas dosis de marihuana con el incremento del riesgo de problemas de salud mental, sobre todo en los más jóvenes.
Washington, Oregón, Alaska y Colorado legalizaron la marihuana entre 2014 y 2016, siendo de los primeros estados en hacerlo.
¿Se ha visto alguna tendencia particular en el consumo de drogas más nocivas?
Las autoridades estadounidenses reunieron información sobre muertes por sobredosis de drogas y, entre 2013 y 2017, 35 estados mostraron un aumento significativo de muerte por esa causa.
Alaska estuvo incluido en esos 35 estados, pero Washington, Colorado y Oregón, no.
La mayoría de esas sobredosis fatales se debieron al abuso de opioides.
Sin contar Alaska, las muertes por sobredosis en Colorado, Washington y Oregón no incrementaron de forma destacable entre 2013 y 2016, el último año con datos disponibles.
Según diversas estimaciones, el consumo de cocaína en estos cuatro estados estuvo por encima del promedio nacional entre 2013 y 2014. Pero dicho promedio también fue mayor en tres de estos cuatro estados en 2012, antes de que la legalización de la marihuana entrara en vigor.
Teniendo en cuenta la cantidad de factores que en cada estado afectan al consumo de drogas como la disponibilidad, suministro, tratamiento y programas de rehabilitación, legalidad y condiciones sociales y económicas, es difícil sacar conclusiones firmes.
Por lo tanto, se necesitan más investigaciones durante períodos más largos de tiempo para identificar si existen tendencias sobre e uso de otras drogas en los estados donde se ha legalizado la marihuana.
Tomado de BBC MUNDO