Cuando se habla de diagnóstico el método más importante para detectar el cáncer es el estudio histológico.
Los marcadores tumorales son moléculas derivadas o asociadas a un tumor que pueden detectarse en la sangre o en otros líquidos orgánicos.
No son métodos que permiten un diagnóstico primario, sino más bien ayudan a formularlos.
Pedro Antonio de Jesús Bergés Caratini, patólogo de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), explica que entre esos marcadores se encuentra el CA (antígeno carcinoembrionario), que es producido normalmente por el intestino, el hígado y el páncreas fetal, es elaborado también por los cánceres de colon, páncreas, el estómago y mama.
Con menos frecuencia se encuentran niveles aumentados en enfermedades noneoplásicas (por ejemplo, fibrosis alcohólicas, hepatitis y colitis ulcerosa).
Este antígeno permite valorar la carga tumoral en el cáncer colorrectal y detectar las recibidas después de la cirugía.
El médico también hace referencia a la alfafetoproteína, que es un producto normaldel saco vitelino y del hígado. Sus concentraciones séricas aumentan mucho en los cánceres de hígado y en los tumores de células germinales del testículo. Otras afecciones no neoplásicas como la fibrosis y la hepatitis se asocian a elevaciones menores de esta proteína.
Los métodos
Bergés detalla que las mediciones de los niveles de alfafetoproteína ayudan a identificar la presencia de un cáncer hepático y/o testicular, así como valorar las recidivas, las metástasis y las respuestas al tratamiento. Por otro lado, el especialista señala que cuando se habla de diagnóstico, el método más importante para detectar el cáncer es el estudio histológico.
El médico refiere que existen algunos factores que contribuyen mucho al buen diagnóstico histológico, como es la disponibilidad de todos los datos clínicos pertinentes, conservación y obtención adecuadas de la muestra, y en algunos casos, el estudio de la muestra en congelación para detectar receptores de superficie celular.
Cortes de tejido
Bergés explica que, además de los habituales cortes de tejido fijado e incluido en parafina, se utilizan cortes porcongelación para hacer un diagnóstico rápido, mientras el paciente se encuentra aún bajo anestesia.
También se hace uso de la punción o aspiración con aguja fina, que consiste en la extracción de células y líquido de los tumores o masas que afectan a localizaciones palpables, por ejemplo, mama, tiroides, ganglios linfáticos.
Las células aspiradas se extienden a un portaobjeto, se tiñen y se estudian, describe el médico al referirse al tema.
Asimismo, la extensiones citológicas (Papanicolaou), estas consisten en el estudio de células cancerosas que se descaman fácilmente. La citología exfoliativa se usa sobre todo para el diagnóstico de la displasia, el carcinoma in si tu e infiltrante del cuello uterino y de los tumores de estómago, bronquiales y de la vejiga urinaria.
Bergés afirma que la interpretación se basa fundamentalmente en las alteraciones morfológicas de cada una de las células. En manos de un experto, los resultados positivos falsos son raros, pero si pueden producirse negativos falsos debidos a errores de muestreo.
Inmunocitoquímica
Enfatiza que siempre que sea posible, antes de instaurar un tratamiento, el diagnóstico citológico siempre debe confirmarse con la biopsia.
De igual modo, el galeno señala la inmuno citoquímica, describe que se basa en la detección de productos celulares o de marcadores de superficie mediante anticuerpos monoclonales.
La unión de estos puede ponerse de manifiesto con marcadores fluorescentes o mediante reacciones químicas que dan lugar a un producto coloreado.
“Esta técnica es útil en caso de que, el diagnóstico de tumores indiferenciados mediante la detección de filamentos, intermedios específicos de cada tejido, clasificación de leucemias y linfomas usando anticuerpos monoclonales, específicos de diversas células hematopoyéticas, determinación del lugar de origen de las metástasis mediante reactivos que identifican tipos celulares específicos (por ejemplo el antígeno específico, prostático para el cáncer de próstata), y detección de moléculas de significado pronóstico o terapéutico (deteccióninmunohistoquímicadereceptoreshormonales y de productosoncogenes, como el c-erbB2, en el cáncer de mama).
La medición del contenido en DNA es útil
La medición del contenido en DNA de las células tumorales mediante la citometría de flujo es útil, ya que son varios los tumores en los que existe una relación entre el contenido anormal de DNA y el pronóstico.
La detección mediante esta técnica de los antígenos de superficie ayuda al diagnóstico de leucemias y linfomas.
Buena correlación clínica-patológica
Casos. El especialista afirma que para el médico patólogo es de suma importancia obtener datos clínicos del paciente tales como la edad, la sintomatología, la localización exacta de la lesión en estudio, el presunto diagnóstico clínico, así como que se obtenga una muestra o biopsia representativa de la lesión para de esa manera poder hacer una buena correlación clínica-patológica y así poder determinar un diagnóstico definitivo, preciso y conclusivo de la lesión estudiada y establecer un tratamiento.
Bergés apunta que “en nuestro medio, los cánceres que con mayor frecuencia diagnosticamos son, en la mujer son de pulmón, mama y el de colon, mientras que en el hombre los cánceres más frecuentes detectados son próstata, colon y el pulmón, también los carcinomas tiroideos”.