Los ciudadanos deben ser motivados e involucrados en el proceso de reciclaje, dijo Lorna Aquino, de Green Love . De león
SANTO DOMINGO.-La falta de cultura de reciclaje y las debilidades en la gestión de recogida de los desechos sólidos impiden que los empresarios exportadores de residuos plásticos tengan acceso a materiales en buenas condiciones y a precios asequibles sin intermediarios.
Los plásticos son colectados por los llamados “buzos” que hurgan en la basura que llega al vertedero de Duquesa. Estos se trasladan a ese lugar antes de salir el sol y seleccionan la montaña de desperdicios de donde comienzan a sacar fundas, botellas plásticas, sillas, metales, hierro y otros materiales reciclables en cualquier condición que lo encuentren.
En esa labor se la pasan hasta caer el sol, momento en que reúnen su botín y lo depositan en una balsa dentro del botadero hasta alcanzar una cantidad suficiente para llenar uno o varios camiones.
Es ahí donde entran los intermediarios. Un grupo que se hace llamar Asociación de Recicladores, a los cuales los “buzos” están obligados a vender los plásticos y otros materiales reciclados.
Esa agrupación tiene prohibido que los “buzos” vendan de manera directa a los recicladores formales e informales.
Control residuos
Eso lleva a los empresarios exportadores y procesadores de plástico regulados en el país a tener que comprarles a esos “suplidores”, porque no obtienen la materia prima suficiente en los centros de acopio para exportar, afirma Carlos Mancebo, presidente de la empresa de reciclaje Virindem.
“Por la falta de una ley que regule este negocio tenemos que comprarlo así”, señaló Mancebo a EL DÍA.
Esa informalidad da cabida a que también los choferes de los camiones recolectores de basura de los ayuntamientos aprovechen ese mercado y antes de llegar al vertedero de Duquesa desmonten el plástico en las recicladoras formales e informales, detalló Segundo Montero, quien lleva más de 10 años en este oficio.
Las recicladoras informales ofrecen precios más factibles para los vendedores de ese material, ya que al no estar reguladas tienen menos cargas impositivas, precisó Carlos Díaz, presidente de la empresa Recicladoras del Cibao.
El director de Operaciones del Vertedero de Duquesa, José San Fernández, expresó que el control por parte de esa asociación de los residuos reciclables que entran al vertedero es una práctica desde hace varios años. “Nosotros no intervenimos en eso, porque ellos están legalizados y nosotros les damos las facilidades”, indicó.
Pero sin embargo los empresarios alegan que hasta la fecha no existe ninguna asociación de recicladores, ya que en varias ocasiones han intentado organizarse pero fracasan.
Medidas futuras
“Este negocio que ha crecido de manera informal, mientras se va desarrollando se formaliza, pero eso hay que corregirlo”, precisó Francisco Florenciano, director administrativo de Duquesa.
“No es posible que nosotros recogemos la basura, la traslademos aquí y ellos ganen y el vertedero no”, lamentó. Indicó que con el relleno sanitario de Duquesa se pretende regular esa temática en la que los “buzos” deben participar en el proceso organizado de ese relleno.
280 Mil libras
De plástico en cuatro años recibió el centro de acopio de Green Love, según Lorna Aquino, directora de esa agrupación.
100 MIL PESOS.
Recolectan los “buzos” cada día en el vertedero de Duquesa dijo Francisco Florenciano.