Santiago.-El presidente Luis Abinader arrancó el fin de semana en Santiago lejos de los salones cerrados y los actos rígidos.
Lo hizo entre villancicos, vecinos y niños del entorno de la Casa Presidencial, en el sector La Trinitaria, donde el espíritu navideño sirvió de excusa para algo más simple y quizá más poderoso: el contacto directo.
“Lo importante es que también somos vecinos”, dijo el mandatario, casi en tono de conversación, mientras compartía canciones y sonrisas con familias de la zona.
Era un mensaje sencillo, de esos que conectan. Navidad, recordó, es amistad, familia y cercanía.
Y eso fue exactamente lo que se respiró en el encuentro animado por la Orquesta Filarmónica de la Armada Dominicana, que puso música a una tradición que el presidente ha decidido repetir cada año. Ese primer gesto marcó el tono de una agenda intensa en la provincia.

De los villancicos, Abinader pasó a los hechos concretos. En Hato del Yaque entregó 180 apartamentos del Plan Mi Vivienda a familias que durante años vivieron en condiciones extremas, muchas de ellas a orillas de ríos y cañadas en Arroyo Gurabo. Con esta entrega, ya suman 1,320 las viviendas levantadas para personas que antes vivían con el miedo constante de perderlo todo en una crecida o una tormenta.
“Antes había incertidumbre; ahora hay oportunidades”, resumió el ministro de Vivienda, Carlos Bonilla, mientras pedía a los beneficiarios cuidar los espacios comunes y fortalecer la convivencia. No se trataba sólo de paredes nuevas, sino de crear comunidad.

El director del Inapa, Wellington Arnaud, dijo que esas familias antes no tenían servicios básicos, pero ahora tienen agua, orden y posibilidades reales de desarrollo.
Y el presidente ejecutivo del Banco de Reservas, Leonardo Aguilera, informó que la inversión total se acerca a los RD$6,000 millones para crear un hábitat digno, con áreas verdes, espacios deportivos y zonas recreativas.
El mismo día, el presidente dejó inaugurada la Escuela Básica Hato del Yaque, un reclamo histórico de la comunidad.
Son 26 aulas, comedor para 360 estudiantes, cancha, cocina y estacionamiento. Más de 650 niños y niñas que ya no tendrán que desplazarse largas distancias para recibir docencia.
La agenda siguió en el área de salud, otro de los ejes que el Gobierno ha insistido en fortalecer.
Junto a la vicepresidenta Raquel Peña, Abinader inauguró el Hospital Especializado de Medicina Avanzada (HEMA), un moderno centro de tercer nivel que marca un antes y un después en la oferta de servicios de alta complejidad en Santiago.
Con 179 camas, 80 consultorios y más de 1,100 empleos directos, HEMA no solo amplía la capacidad hospitalaria, sino que posiciona a Santiago como un referente nacional y regional en turismo de salud. El ministro Víctor Atallah habló de la presión que enfrenta el sistema por la demanda de camas; el hospital llega, dijo, como una respuesta concreta y necesaria.
Pero si algo quedó claro durante el fin de semana es que la agenda presidencial no se quedó en la ciudad. Abinader subió a la Sierra de Santiago para inaugurar 48.49 kilómetros de carreteras y calles que por años fueron promesa y reclamo.
La inversión, de RD$3,500 millones, fue ejecutada por EGEHID como parte de su compromiso social en la zona de influencia del complejo hidroeléctrico Tavera–Bao–López-Angostura.
Calidad de vida
— Desarrollo
El ministro de Obras Públicas, Eduardo Estrella, enfatizó que la intervención en La Sierra no es una excepción, sino parte de una política nacional de infraestructura que busca equilibrar el desarrollo y saldar desigualdades.