Santiago de Chile.-Trotamundo. Yvonne Losos de Muñiz, representante de República Dominicana en los Panam 2023 en doma clásica, es una trotamundos que se crió corriendo detrás de cebras en África y desde hace años se destaca como jinete en América.

Losos, de padre polaco y madre alemana y casada hace 25 años con el español Eduardo Muñiz, nació en Nigeria, luego vivió en Kenia y Canadá hasta que hace 30 años se fue a República Dominicana.

Experiencias exitosas
Estas experiencias, dijo, le han “ayudado en todo” en su vida, y que las oportunidades que ha tenido por vivir en diversos países, son recomendaciones que le ha dado a sus dos hijos para tener una mente más abierta, pues así conocen más personas y la cultura de cada lugar que visitan.

“A nuestros hijos les hemos dicho que tienen que ver mundo, para decidir dónde es que ellos quieren estar, y si también quieren estar en un solo país”, indicó Losos.

“Unos tienen una opinión o punto de vista muy cerrado, pero si pueden viajar para ver otras culturas y países, hoy en día es muy importante”, explicó tras concluir su participación en la segunda ronda de la competencia de doma clásica en los Panam.

Corría tras las cebras
Una de las anécdotas más destacadas e impresionantes que relató Losos de su niñez fue que cuando vivía junto a su familia en Kenia, se iba con su padre, el fenecido investigador y científico George Losos, a correr a caballo detrás de cebras y otros animales salvajes.

Su padre polaco se crió en India, decidió vivir en Kenia para escribir un libro para una investigación sobre el impacto de enfermedades tropicales en animales domésticos.

Pero, no fue hasta hace 30 años que Losos, quien domina tres idioma -español, inglés y alemán- visitó la República Dominicana de vacaciones y conoció a su esposo, con quien se vinculó en el deporte de la doma clásica al nivel de representar al país.

Claves para triunfar

— La comunicación
Losos dice que la clave para dominar el deporte es “la comunicación que tenemos con el caballo» y que para llegar a este nivel, mínimo son 10 años. . Es un mundo muy sano y muy bonito en el cual me siendo excelente”.

*Por Jorge J. Muñiz