El presidente Leonel Fernández está decidido a hacer una campaña presentándose como un Estadista, un académico y un intelectual (que aunque se parece no es lo mismo).
En esta fase está aprovechando todos los espacios en los que desde la óptica académica puede hacer campaña proselitista, pues aprovecha esos espacios para buscar empatía con la población y hasta ahora el balance ha estado a su favor.
La defensa realizada en foros internacionales sobre la posición del Gobierno dominicano con relación a la última sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos ha traducido el sentir de la gran mayoría de los dominicanos y le ha facilitado el camino a las autoridades nacionales.
No deja pasar una
El exmandatario también está atento a sus cartones. Así como dos profesores de una universidad norteamericana hicieron pública una carta en la que intentaban invalidar la ponencia de Fernández ante la OEA en la que defendía la posición dominicana en torno a la citada sentencia, el exmandatario se tomó el tiempo para responder todos los puntos de los catedráticos norteamericanos y devolverles el golpe con mucha elegancia y abandonar el aire académico.
También se encargó de hacer pública su respuesta, con la diferencia de que ésta fue más difundida.
Negociar adentro para combatir hacia afuera
Muchos adversarios del Partido de la Liberación Dominicana cometieron el error en las elecciones pasadas de analizar los escenarios de la lógica del PRD y podrían estar cometiendo ese mismo error ahora.
Resulta que en el PRD es común ver que dirigentes prefieran que su partido pierda unas elecciones con tal de que un adversario interno no llegue al Poder.
La historia tiene numerosos casos.
Sin embargo, el PLD ha demostrado, hasta ahora, que al final de cualquier proceso prefiere al más malo de los de ellos que al mejor de sus adversarios.