Bloomberg News.–La caída del juego online afecta a los casinos de Atlantic City que, según el gobernador Chris Christie, son cruciales para la recuperación de Nueva Jersey, sumándose a déficits de ingresos que ponen en peligro la calificación crediticia del estado.
Cinco meses después de que Nueva Jersey autorizara las apuestas en Internet, el negocio tuvo su primera caída en abril. Esta se agrega a los problemas que padecen los once casinos, cuyos ingresos se redujeron un 44 por ciento desde su pico más alto en 2006. Nueva Jersey depende de Atlantic City para el empleo, los impuestos y el atractivo de su zona de balnearios.
La caída significa menos impuestos para Christie, quien la semana pasada dijo que reduciría las pensiones para cubrir los faltantes de presupuesto.
Las palabras del gobernador republicano fueron recibidas con escepticismo por los analistas y los legisladores en mayo pasado cuando pronosticó que Nueva Jersey ganaría US$180 millones en este año fiscal con un impuesto al juego online de 15 por ciento. Al ritmo actual, obtendrá unos 12 millones de dólares.
“No creo que nadie tenga la bola de cristal para predecir cómo estará el mercado”, dijo en entrevista telefónica Tom Ballance, máximo responsable ejecutivo del Borgata Hotel Casino Spa, el más importante en el negocio de juego online de Nueva Jersey.
