La entrada del presidente Luis Abinader por las puertas del Partido de la Liberación Dominicana apenas cuatro días después de haber alcanzado una cómoda victoria electoral parece que no fue discutida en el órgano de esa organización política en el que se toman algunas decisiones políticas importantes.
Esto se desprende del alboroto creado con el anuncio de Palacio de que el Presidente se reuniría con Abel Martínez en la Casa Nacional de los morados.
Luego del anuncio parece que alguien vio lo que a simple vista no fue evidente al principio: la entrada triunfal del ganador en la casa de un partido derrotado.
El anuncio de Palacio circuló en la mañana y al anochecer desde la Fuerza del Pueblo se informaba que una gripe de su líder, Leonel Fernández, había obligado a una posposición.