Lo botaron

La expulsión de Carlos Amarante Baret, decidida el viernes pasado, es atribuida al Tribunal Nacional de Ética y Disciplina del Partido de la Liberación Dominicana, que encabeza la veterana dirigente Alejandrina Germán.

Pocos creen, sin embargo, que se trate de la decisión originada en una instancia de su tamaño, visto el procedimiento expreso utilizado para poner fuera a un dirigente de su nivel, que había ostentado la condición de miembro del Comité Central y del Comité Político, titular en una ocasión de Interior y Policía y en otra de Educación, además de haber sido parte del círculo de Danilo Medina, presidente de la organización política.

Es cierto que hace dos meses pidió, junto a otros miembros del PLD, la salida del presidente de la organización, como una manera de abrirles la puertas a otros ante el derrumbe electoral.

Ring, ring, ring…
Desde el fin de semana el de Amarante Baret es uno de los teléfonos más buscado, sin duda, para conocer su posición ante la medida de la Comisión de Ética y Disciplina.

Lo que se decía en la semana era que ante el rechazo de la posición que había asumido en julio pasado, cuando pidió junto a otros la salida de Medina de la presidencia del PLD, daba los pasos para irse y formar un bloque político opositor, pero esto no ha podido ser verificado.