San Cristóbal .– A casi 25 años del paso del huracán George sobre el territorio dominicano, damnificados de San Cristóbal siguen luchando por sobrevivir en una edificación donde llueve adentro y escampa afuera.

Y es que estas familias que perdieron todo con el ciclón, viven donde años antes funcionaba la marina, un edificio en el que las filtraciones obligan a estas personas a colocar fundas para evitar que el agua les caiga encima.

Esta situación se podía observar al visitar la zona ante las lluvias que se esperaban cayeran sobre el territorio nacional por la incidencia de la tormenta tropical Franklin, y que se estima ocurran inundaciones.

«Con estas lluvias estamos cubriéndonos con plásticos... es una situación bien difícil la que vivimos aquí, vivimos aquí por la obligación de que no tenemos otra forma de hacerlo», dijo Teresa Bautista, residente en el lugar.

Bautista, quien vive ahí con su esposo, explicó que con este clima no tienen ninguna seguridad, ya que filtra mucha agua, por lo que temen pueda en algún momento derrumbarse la infraestructura.

«Quisiéramos que las autoridades se conduelan de nosotros y nos liberen de este calvario que estamos viviendo», exclamó.

Luis, un joven que nació y se ha criado en este lugar, comentó a reporteros de EL DÍA que abundan los mosquitos, una situación que empeora debido a la acumulación de agua, la cual puede provocar la proliferación de enfermedades como el dengue, que son transmitidas por estos vectores.

Estas personas, a pesar de los años que llevan viviendo en estas precarias condiciones y en palabras de ellos “cogiendo lucha”, esperan que las autoridades de la provincia los reubiquen para poder vivir dignamente.