Santo Domingo.-Cuando en abril de 1965 tropas invasoras norteamericanas mancillaron por segunda vez la soberanía nacional dominicana, un grupo de haitianos que se había refugiado en el país huyendo de la represión de Duvalier no lo pensó dos veces y empuñó las armas para luchar contra el imperio más poderoso del planeta.
Algunos, como el poeta combatiente Jacques Viaux Renaud cayeron en combate en medio de la guerra, otros fueron víctimas de la cacería desatada por la dictadura ilustrada de Joaquín Balaguer en los gobiernos de los 12 años.
Algunos lograron salvar la vida saliendo del país como exiliados y sus rastros se fueron borrando con la muerte, la distancia y el olvido.
Lionel Vieux es uno de aquellos haitianos, héroes anónimos que derramaron sangre en defensa de una patria que no era la suya, pero a la que amaba y aún ama.
Su tez mulata y su acento cubano apenas dejan adivinar que es oriundo de la patria de Dessaline.
Amigo de Jacques Viaux
Compañero de Jacques Viaux, se siente orgulloso de haber arriesgado su vida en defensa de la República Dominicana. Apenas tenía 27 años de edad.
Vieux era parte de un grupo de exiliados haitianos que se entrenaba en República Dominicana para derrotar a la dictadura de Francois Duvalier, cuando estalló la Revolución de Abril.
“Creo que fui el primer haitiano en asilarse en la embajada dominicana después de la muerte de Trujillo y llegando aquí hice contacto a través de Jacques Viau Renaud con todos los grupos de guerra de aquí de aquel entonces, del 14 de Junio, el MPD, el Partido Socialista”, expresa Vieux.
Recuerda la solidaridad de muchos dominicanos con él, que le dieron trabajo o le alquilaron una habitación, o aquel sastre que le permitía dormir en su mesa de trabajo, la cual compartía con otros dos exiliados.
Hace un esfuerzo por recordar aquel dueño de una pensión en la Santomé que le fiaba comida y cigarrillos para que le pagara cuando pudiera, a sabiendas de que ese día probablemente nunca llegaría.
El comando haitiano
“El comando haitiano tenía entre 40 y 50 hombres, bajo la dirección de Fred Baptiste y yo era y soy izquierdista y él estaba ligado más ideológicamente con el 14 de Junio y el MPD y cuando los yanquis entran en la contienda, nosotros nos manifestamos en pro de la defensa de la soberanía dominicana y nos alistamos en el comando”, expresa.
Una parte de ellos se integró a la armería, y eran los responsables de arreglar las armas cuando presentaban algún defecto. Estaba en el parque Independencia y trabajaba directamente con Caamaño.
Otros formaban parte del comando B3, donde estaba Jacques Viaux, Pedro Bonilla, Norge Botello, Diómedes Mercedes, “fuimos entrenados para pelear”, dice.
El 21 de junio cayó en combate Jacques Viaux, el poeta. Así perdía el comando haitiano a uno de sus mejores hombres.
Una vez terminado el conflicto, Lionel Vieux tuvo que refugiarse en un batey de La Romana, pero lo descubrieron, lo apresaron y torturaron.
Finalmente fue enviado al exilio, a Cuba, donde vivió 25 años y tuvo una familia.
A 50 años de aquella experiencia, Vieux está más convencido que antes de que hicieron lo correcto, y lo volvería hacer, a pesar de llevar a cuesta más de siete décadas.
La migración haitiana a RD
Lionel Vieux tiene una visión propia sobre las relaciones dominico-haitianas y la actual “crisis”.
Y no se deja confundir porlos extremistas que en Haití y Santo Domingo le echan leña al fuego y alientan la confrontación. Él analiza el tema desde la óptica de la lucha de clases, tan simple como eso.
Explica que cuando el haitiano viene a República Dominicana lo hace en busca de trabajo para sobrevivir.
“Las condiciones nunca las pone el trabajador y mucho menos cuando es analfabeta, no especializado”, y sin contar siquiera con el apoyo de la embajada de su país.
Dondequiera el haitiano ha padecido como todo trabajador, “la lucha de clases nos enseña eso, que no es por ser haitiano, es por ser trabajador que tienes ya un bloque de explotación que te pertenece”.
Martelly es un demagogo
Vieux considera que el gobierno de Michel Martelly ha sido irresponsable frente a sus ciudadanos y critica la decisión de llamar a su embajador Daniel Supplice por hacer una autocrítica a su gobierno.
“El esfuerzo mayor tendría que venir de Haití y su gobierno”.
Sin embargo, considera que eso no exonera al gobierno dominicano de su responsabilidad de mejorar las condiciones de vida y de trabajo de los trabajadores ya sean haitianos o dominicanos.
Un pleito sin ganadores
Le preguntamos a Vieux sobre quién cree él que se beneficia del deterioro de las relaciones entre Haití y República Dominicana.
“ En vez de yo decir quién se beneficia, yo mejor diría quién pierde, yo creo que los pueblos son los que pierden”, reflexiona.
Advierte que el actual diferendo que tanto entretiene a la opinión pública se debe a intereses de las cúpulas que dirigen tanto en Haití como en República Dominicana.
“Yo creo que los pueblos salen perdiendo y que todo debe hacerse para evitar precisamente que los cojan de relajo”.
Hablar de unificación es una bobería
Lionel Vieux es categórico al descartar la idea de la unificación de las dos naciones que comparten la isla de Santo Domingo, a pesar de que entiende la necesidad de una relación armónica, pacífica, entre ambos pueblos.
¿En sus 77 años ha escuchado hablar de la unificación de los dos países?
“Eso es imposible”, responde, “eso es una bobería, tenemos culturas diferentes”.
En opinión del hombre que en 1965 luchó junto a Caamaño y los constitucionalistas, la unificación de República Dominicana y Haití es improcedente y quien plantee eso ahora “está mal de la cabeza”.