La Romana.-El liceo nocturno Tiburcio Millán López mantiene paralizados sus laboratorios de Informática, Ciencias Naturales, Biología y Química desde hace tres y dos años, respectivamente, los cuales se han ido deteriorando con el paso del tiempo y la falta de mantenimiento.
Este plantel, que opera en la tanda matutina y vespertina como el liceo Arístides García Mella, con una matrícula de 3 mil 433 estudiantes, tampoco cuenta con una biblioteca para sus estudiantes, vigilancia policial ni recursos para el mantenimiento y limpieza de sus instalaciones.
De ahí que lucen abandonados el centro de cómputos, sus pisos, paredes y, le faltan ventanas en diferentes aulas. Uno de sus baños es utilizado para depósito de libros en desusos porque no tienen dónde colocarlos al servicio de los alumnos.
Vicente Santana, director de la tanda matutina, con mil 150 estudiantes, narró: Estamos contemplando la creación de un espacio de autogestión, que opere como una pequeña secretaría para cubrir servicios que son elementales como es la limpieza.
Imagínese esa cantidad de personas tirando al menos un papelito o un vaso plástico, ¿cómo puede estar esto limpio?, comentó.
Apenas siete personas conforman el área de mantenimiento o equipo de apoyo y no tienen presupuesto para gastos misceláneos que incluirían la limpieza y el arreglo de baños.
Esa situación los obliga realizar actividades extras o cobrar una cuota de inscripción tipo cooperación, de acuerdo a la posibilidad de cada estudiante, para destinar lo recaudado a la compra de detergentes y equipos para la limpieza.
Vicente Santana deploró el no contar, además, con seguridad policial, como también entiende que necesitan una especie de trinchera o verja con alambres de púas, que evite el acceso de desaprensivos y bandas ajenas al plantel, que en ocasiones cruzan la verja perimetral y rompen el orden.
El plantel, ubicado en la calle General Gregorio Luperón del sector La Aviación, requiere de pintura, especialmente en su interior.
El mismo fue fundado durante la época del tirano Rafael Leonidas Trujillo y desde entonces ha recibido muy pocos cambios en su estructura, aunque la cantidad de alumnos se ha mutiplicado de manera insospechada en los últimos años.