El intento del presidente mexicano Enrique Peña Nieto de abrir el sector de telecomunicaciones empieza a rendir frutos para los tenedores de bonos que apuestan a que los cambios legales harán de Axtel SAB un objetivo de adquisición.
Axtel, que tiene menos de la décima parte de los clientes de línea fija que la compañía dominante, América Móvil SAB, aceptó el jueves pasado su adquisición por parte del grupo de grado de inversión Alfa SAB en un acuerdo por el total accionario.
Sus US$545 millones de bonos basura con vencimiento en 2020 subieron 11% el viernes, a 101,5 centavos por dólar.
