El país celebraba ayer el Día de las Madres. Sólo las mujeres son madres, pero todos tenemos una madre y el sentimiento más común es el amor de la madre hacia sus hijos y el de los hijos hacia la madre.
El Día de las Madres los hijos hacen todo lo posible por estar con sus hijos y los hijos se esfuerzan por acompañar a sus madres. Dedicarse tiempo de calidad, disfrutar en familia.
Mientras eso ocurría con la generalidad de las personas, algunos profesionales tenían que dividir su día, incluso bajo protesta, porque la responsabilidad llama.
La redacción de EL DÍA no era la excepción.
Todos los reporteros querían terminar temprano sus labores para irse a estar con sus madres o sus esposas que son madres.
Pero aquí había un grupo muy peculiar de periodistas que ellas mismas son madres, que tienen a sus madres vivas (algunas en el interior) y tenían que estar en la sala de redacción cumpliendo con su deber de informar tanto a través de las plataformas digitales como en esta edición que sale hoy.
En sus escritorios no había flores, sino papeles, documentos, libretas y un teléfono tan activo como un día cualquiera.
EL DÍA quiere felicitar a todas las madres dominicanas, pero pide la dispensa de hacer una distinción particular a esas madres periodistas que sacrificaron tiempo de la celebración para preparar esta edición y mantener actualizada la versión digital durante todo el domingo.
