Santo Domingo .-Los eventos extremos como el calor excesivo, lluvias o tormentas en períodos no acostumbrados son parte de los cambios que experimenta el clima fruto del cambio climático, lo que cuales inciden negativamente tanto en la producción de energía como en el consumo.
Para los primeros 11 meses de la demanda de energía supera el promedio de 9 % respecto mismo período del pasado año.
Sólo si se compara el mes de noviembre del año en curso (3,205.07 MW) con el año anterior (2,693.00 MW) el aumento de la demanda es de un 19 %, es decir, 512.07 megavatios de energía, explicó Antonio Almonte, ministro de Energía.
Pero este no ha sido el único mes de mayor demanda, indica Almonte al explicar que para este año, la mayor demanda ocurrió en el mes de octubre, registrando un valor medio de 3,436 megavatios.
“Este registro es atípico que ocurra para este mes del año debido a que los incrementos de la demanda se relacionan con los incrementos en las temperaturas durante las estaciones del año, significando esto que, los mayores registros de demanda deberían ser en los meses más calurosos del verano (junio-septiembre)”, resaltó el funcionario a El DÍA.
Almonte explicó que el cambio climático afecta directamente el aumento en el consumo de electricidad debido a varias razones; puso como ejemplo que la temperaturas extremas, impulsan el uso intensivo en acondicionadores de aire para compensar el calor, lo que a su vez incide en la necesidad de mayor demanda de electricidad. Impacto en producción.
Almonte explicó que las altas temperaturas o sequías también impactan en la generación hidroeléctrica. Señaló que con la reducción en la frecuencia de la lluvia ha afectado la disponibilidad de agua destinada para la generación hidroeléctrica.
Detalló que el uso del agua en los embalses de las presas está distribuido en: para uso de consumo humano, riego agrícola y generación de electricidad.
Apuntó que los períodos de sequía reducen la producción de electricidad proveniente de las hidroeléctricas, ocasionando la dependencia de otras fuentes de energía como el gas natural y fueloil.
Dichos datos que coinciden con el informe económico del Banco Central en cuanto a la producción de agua y energía, indica que la sequía que ha afectado al país desde finales de 2022, y la subactividad de producción de agua percibió una caída 6.5 % al cierre del período referenciado.
Este resultado responde a la disminución de los caudales de ríos como el Haina, Duey, Isa, Mana, Isabela, Nizao y Ozama, los cuales representan fuentes importantes de abastecimiento de agua para los principales acueductos del país.
Huracanes y tormenta
Los huracanes y tormenta también son eventos climáticos que afectan el sistema energético dominicano, los cuales provocan daños a la infraestructura eléctrica, ocasionando interrupciones del servicio de electricidad y la necesidad de realizar reparaciones, lo que a su vez eleva la demanda eléctrica durante la recuperación, dijo Almonte al EL DÍA.
Según datos de los boletines del Centro de Operación de Emergencia en las últimas tormentas registradas a nivel local han dejado a miles sin energía.
En el caso de la tormenta Franklin dejó unos 406,549 usuarios sin el servicio de energía eléctrica en todo el país. Igual pasó con la tormenta Fiona que dejó unas 406,539 hogares sin servicio de energía eléctrica y el último disturbio tropical dejó sin electricidad a cerca de 500 mil usuarios de las empresas distribuidoras de electricidad del Estado.
Incidencia
— Costos
El costo económico adicional incurrido para suplir la mayor demanda registrada en octubre 2023 ha sido US$15,260,305.23 aproximadamente, en comparación con octubre 2022, según el Ministerio de Energía y Minas