Santo Domingo.-Las patologías poco frecuentes afectan a un gran número de personas, ya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen cerca de 7,000 enfermedades raras que sufren el 7 % de la población mundial .
Estas se caracterizan por una amplia diversidad de trastornos y síntomas que varían no sólo de enfermedad, sino también entre los pacientes que sufren del mismo padecimiento.
Algunas de estas enfermedades pueden causar incapacidad y afectar la calidad de vida de los pacientes, lo que conlleva a la falta o pérdida de autonomía del individuo, debido a los aspectos crónicos, progresivos y degenerativos, característicos de la enfermedad.
Linfocítica y linfoma
De acuerdo con la Organización Nacional para los Trastornos Raros, la leucemia linfocítica crónica (LCC) y el linfoma de células el manto (LCM), son consideradas enfermedades raras.
LCC es un cáncer de la sangre de desarrollo lento que se origina comúnmente a partir de las células B, un tipo de glóbulo blanco (linfocito) que se forma en la médula ósea.
De acuerdo a datos estadísticos de la Sociedad Americana de Cáncer, la leucemia linfocítica crónica (LLC), representa aproximadamente el 25 % de los nuevos casos de leucemia, con lo cual constituye la forma de leucemia más frecuentemente diagnosticada en adultos.
Por otra parte, el LCM es un tipo de cáncer de sangre que inicia en los ganglios linfáticos. A éste padecimiento se le llama de células del manto, porque el cáncer inicia en la “zona del manto” (la zona periférica) de los ganglios linfáticos.
La causa exacta de ambos cánceres hematoncológicos no se conoce, en la leucemia linfocítica crónica intervienen ciertas alteraciones genéticas (cambio permanente en el mapeo genético de una persona) adquiridas (no presentes al momento de nacer) .
Muchos de los síntomas de la LLC y de la LCM también pueden ser parecidos a los síntomas de otras enfermedades, haciendo todavía más difícil su diagnóstico.
Cuando una persona es diagnosticada con LLC o LCM, el médico deberá determinar la etapa en la que se encuentra la enfermedad.
El especialista considerará varios factores, como muestras de sangre, por ejemplo: conteo de glóbulos rojos y plaquetas.
Identificar los ganglios linfáticos: cuello, axila, entrepierna/área genital, bazo, hígado y otras partes del cuerpo, como la médula ósea, que puedan estar afectados. Conocer esta información, permitirá al médico decidir el tratamiento y su pronóstico.
… libre de quimioterapia
Francisco González, gerente médico de oncología de Janssen para Centroamérica y el Caribe, indica que: “existe un porcentaje de pacientes que nunca responden a los tratamientos inicialmente indicados para cualesquiera de estas dos patologías y es a quienes se conoce como “pacientes refractarios”.
Por otro lado, existen aquellos que sí lograron una respuesta o remisión inicial de la enfermedad, gracias al tratamiento ofrecido pero posteriormente e inevitablemente la pierden, lo cual se conoce como que presentan recaídas.