Se recomienda una dieta de consistencia blanda, pero con alto contenido de proteína como el huevo, pollo o pescado blanco.
SANTO DOMINGO.-“Desde el primer momento en que una persona toma la decisión acertada de someterse a un procedimiento de bariátrica, también tiene que asumir la responsabilidad de llevar un estilo de vida saludable”, así lo afirma Pablo García Vargas, cirujano bariátrico laparoscopista.
Trata el tema a propósito de que se aproxima una época de fiestas en la que algunos rompen la dieta y, por qué no, hasta echan a un lado el tratamiento.
“Entonces, en lo que a los pacientes de bariátrica respecta, es bueno que sepan que sí pueden compartir en familia, pero con la salvedad de que deben poner por encima de todo, su salud”, advierte el especialista.
El también miembro-fundador de la Sociedad Dominicana de Cirugía Metabólica y Bariátrica aconseja a las personas que han sido sometidas a este procedimiento, a que recuerden que ya no tienen la misma capacidad gástrica, que demanda de un cuidado estricto, que ha de ser lo que garantice el éxito de la cirugía y, por supuesto, la salud del paciente.
Alimentos saludables
García Vargas dice que, luego de una bariátrica, el paciente debe consumir alimentos saludables, sencillos y de poco volumen, y agrega: “Hay que recordar que las limitaciones que tiene el paciente luego de esta cirugía deben tomarse en cuenta en todas las épocas del año”.
Indica que la Navidad no es la excepción, “de ahí que mi propuesta para que disfruten de las fiestas, a través de la comida, está basada en las etapas en las que esté el paciente”.
Dice que si ya pasó la etapa de consumir líquidos claros, con poca sal y condimentos, puede optar por una dieta de alimentos de consistencia blanda, pero con alto contenido de proteína como el huevo, quesos bajos en grasas, pollo o pescado blanco, aunque hay alimentos que no son bien tolerados por el paciente.
Por considerar que cada uno es distinto, y como tal se indica la dieta según cada caso, lo ideal es seguir al pie de la letra lo que prescribe el especialista.
Sin embargo, advierte, que en todo caso, jamás se deben consumir embutidos, quesos grasos, frutos secos, patés y en definitiva todo alimento con alta proporción de grasa, pues pueden causar fuertes dolores abdominales y flatulencia.
Comprometidos con su salud
Bajo ningún concepto, les recomiendo a mis pacientes consumir alimentos grasos que, lejos de hacerle pasar un buen momento, pueden traerles muy malas consecuencias. Y como todos sabemos, en Navidad abunda la comida con grasa y de difícil digestión. No hay excusa para no compartir, pero sin comprometer la prudencia.