La empresa de telecomunicaciones Tricom ha denunciado que la Alcaldía de San Cristóbal le ha impedido instalar postes para la colocación de un cableado de fibra óptica para mejorar la calidad del servicio que ofrece a sus abonados.
Tricom afirma, mediante una comunicación remitida a este diario, que el 4 de mayo el Concejo de Regidores de la Alcaldía de San Cristóbal aprobó la obra y que, sin embargo, el ejecutivo municipal ha obstruido su ejecución.
Todas las empresas telefónicas coinciden en quejarse de lo que ellas llaman trabas que les imponen los ayuntamientos para sus trabajos de expansión.
La explicación, aunque ninguna de las partes lo expresa, es la vieja disputa que existe entre los ayuntamientos y las telefónicas por los controversiales tributos municipales.
Antes de que la Suprema Corte de Justicia se pronunciara en ese sentido, EL DÍA respaldó los planteamientos de los ayuntamientos en el sentido de que la municipalidad debía recibir tributos por los trabajos que en sus territorios realizan esas empresas.
Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia decidió que eso se trataba de una doble tributación y que además contrariaba una Ley Especial, como es el caso de la de Telecomunicaciones.
Por lo tanto, no se imponen las opiniones particulares, sino la del órgano llamado a decidir en los casos de dualidad en la interpretación de las leyes o cuando haya contradicción entre legislaciones vigentes.
En este caso, y cualquier otro, debe imponerse lo que ordena la Ley.
Al buen clima de inversión de República Dominicana le conviene terminar de una vez y por todas con este cíclico pugilato
