Nueva York.- Tanto la Casa Blanca como Naciones Unidas, además de líderes políticos, censuraron hoy la propuesta del candidato republicano a la Presidencia de EE.UU.
Donald Trump de prohibir la entrada al país a todos los musulmanes. Este lunes Trump hizo un llamamiento para prohibir temporalmente la entrada al país de todos los musulmanes por el “odio” que, según sostiene, sienten hacia los estadounidenses.
Su propuesta surgió al calor de las repercusiones por la matanza en San Bernardino (California, EE.UU.), que causó 14 muertos y una veintena de heridos y fue perpetrada por un estadounidense hijo de pakistaníes y su esposa de origen pakistaní.
Por lo menos en el segundo caso, la mujer, Tashfeen Malik, declaró su lealtad al Estado Islámico y la Agencia Federal de Investigaciones (FBI) sostiene que la pareja estuvo radicalizándose progresivamente antes de cometer la matanza, el pasado 2 de diciembre.
La propuesta de Trump recibió una oleada de críticas tanto de otros dirigentes políticos, incluidos miembros del partido republicano, como de expertos legales que ponen en duda la constitucionalidad de su idea y piensan que atenta contra los valores de tolerancia que promueve Estados Unidos.
Para el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, las palabras de Trump “le descalifican para ser presidente” y obligan al resto de precandidatos republicanos a pronunciarse públicamente sobre si apoyarían al magnate si termina siendo el elegido.
En un tono más duro que en otras ocasiones para referirse a Trump, Earnest recordó que lo primero que hace un presidente de EE.UU. al asumir el cargo es jurar lealtad y respeto a la Constitución y el plan del multimillonario populista está en contra de la carta magna estadounidense, específicamente contra las enmiendas que garantizan la libertad de culto y el debido proceso.
Las palabras de Trump no dejaron tampoco callada a la propia ONU que, en contra de su costumbre de no comentar contiendas electorales, expresó su preocupación por los mensajes en contra de los musulmanes expresados por el precandidato republicano a la Casa Blanca.
“No creemos que nadie deba seguir retóricas que se basen en la islamofobia, la xenofobia o cualquier otro llamamiento al odio de algún grupo”, dijo el portavoz Farhan Haq preguntado en una conferencia de prensa.
Por su parte, la precandidata presidencial demócrata Hillary Clinton, que encabeza las encuestas de su partido, afirmó que la postura de Trump es “reprobable” y “prejuiciosa».
Más allá de las críticas previsibles desde el partido demócrata, republicanos como el propio senador Marcos Rubio tachaban de “ofensivas” las declaraciones de su rival.
Fuera de EE.UU, miles británicos firmaron una petición por internet para que la universidad escocesa Robert Gordon retire un doctorado honorífico a Trump por su “discurso del odio».
También desde Reino Unido, el propio Scotland Yard criticó al precandidato republicano por afirmar que hay zonas de Londres tan “radicalizadas” que los agentes temen por su vida al adentrarse en ellas.
“Normalmente no dignificaríamos ese tipo de comentarios con una respuesta, sin embargo, en esta ocasión, creemos que es importante asegurar a los londinenses que el señor Trump no podría estar más equivocado”, afirmó un portavoz de la policía británica.
Igualmente, desde El Cairo, la principal autoridad egipcia encargada de emitir edictos islámicos, Dar al Iftaa, condenó hoy la propuesta del precandidato presidencial por “racista y extremista” y por “aumentar las tensiones dentro de la sociedad estadounidense”, en la que viven ocho millones de musulmanes.
Aunque la reacción más radical quizá haya sido la del alcalde de San Petersburgo (Florida, EE.UU.), Rick Kriseman, que ha anunciado que restringirá la entrada del precandidato a su ciudad.
Pese a la avalancha de reprobaciones, Donald Trump reafirmó este martes en su propuesta. “He recibido el apoyo de miles de personas (…). Algo tiene que hacerse”, afirmó hoy Trump a la cadena ABC, horas después de revolver el panorama electoral con su propuesta.