Parece, hasta tener con resultados concretos, que existe el ánimo en la dirección correcta a favor de una Junta Central Electoral sin matices partidarios o compromisos con sectores políticos, como ha sido el error cometido por el liderazgo nacional bajo la premisa de procurar un supuesto consenso que ha dado el más mínimo beneficio.
El país ha sufrido por la postura del pasado de que partidos tengan representantes o miembros conocidos, lo que ha venido en desmedro de la institucionalidad de la JCE. Sin embargo, viene una corriente favorable con el actual Gobierno de que integrantes calificados de “probos” o “independientes” tengan la oportunidad de servirles al país desde un asiento del organismo comicial, lo que fortalecería la democracia.
Abinader y Leonel
En escenarios diferentes, pero en el marco del diálogo que auspicia el presidente Abinader, salió a relucir posiciones del Mandatario y del expresidente Leonel Fernández para que surja el consenso en el camino de que la Junta deje de ser un dolor de cabeza para la institucionalidad.
Abinader y Leonel son partidarios de que gente sin ataduras partidarias asuman la responsabilidad de la conducción de la Junta, por lo que el Senado deberá evaluar con una lupa y sin presiones a las personas que aspirarán o serán propuestas para sustituir a los actuales miembros, en medio de los cuestionamientos que hubo contra la JCE durante los pasados procesos comiciales.