La explicación la hace la neumóloga Evangelina Soler.
Santo Domingo.- Ya establecido un diagnóstico de neumonía, cuando se considera bilateral, tal como la detectada en el Papa Francisco, quien lleva nueve días ingresado, la tasa de mortalidad está por encima del 30% de los afectados, lo que junto con otros factores de salud incidiendo al mismo tiempo potencializa la morbimortalidad de quienes lo padecen.
Y es que la neumonía bilateral, que significa que la infección se encuentra en ambos pulmones, es de las complicaciones más graves que pueden afectar a una persona.
Así lo explicó la neumóloga Evangelina Soler al ser consultada por EL DÍA, sobre los riesgos que puede tener la condición en una persona como el Papa con 88 años de edad, y que además presentó ayer una crisis respiratoria asmática de la larga duración.
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Resta función con los años
Al respecto, la especialista detalló que los pulmones son órganos que se ven afectados con el paso de los años, sobre todo a partir de los 35 años de edad, por lo que va restado la funcionalidad entre 30 a 60 CC por año.
“Cuando una persona es asmática se produce una inflamación, la cual es la responsable del síntoma más importante o la característica clínica más relevante que es la sibilancia, que no es más que el estrechamiento del paso del aire a través de los bronquios inflamados, y este, por consiguiente, emite un sonido llamado silbido”, precisó.
Cuando estos procesos inflamatorios son repetitivos, el bronquio se va afectando de una manera tal que se vuelve irreversible el daño.
Manifestó que en el caso del pontífice, además de la inflamación por el asma que presenta, también se añade otra condición patológica que son las dilataciones bronquiales o bronquiectasia, las cuales se cargan de secreciones formando un espeso moco, que constituye un caldo de cultivo para el desarrollo de bacterias.
Otro factor: la obesidad
A todo lo anterior, que podría agravarse por la época del año con las bajas temperaturas que hacen que abunden los virus respiratorios, la pasada presidente de la Sociedad Dominicana de Neumología y Cirugía del Tórax agregó que otra situación de riesgo es su marcada obesidad.
“Actualmente el papa está en un sobrepeso con un cuello redundante, por lo que podríamos extrapolar que tal vez podría tener apnea del sueño, situación que empeora aún más la circunstancia de salud de quien hablamos”, puntualizó Soler.
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Yamer Javier
Periodista especializada en la fuente de salud. Máster en Comunicación Estratégica y Relaciones Públicas,
