Santo Domingo.-La naturaleza le hizo una mala jugada. Sin imaginar que sería su última salida y el final de sus vidas, las nueve personas que fallecieron por el colapso de varias placas de las paredes del desnivel de la avenida 27 de Febrero con Máximo Gómez ante el disturbio climático del fin de semana, estos dejaron con el corazón roto a sus familiares y consternada a la sociedad dominicana, que no esperaba una tragedia como esta.

Horas después de lo ocurrido la angustia se a apoderó de los parientes que empezaron a preocuparse por no tener comunicación con sus familiares. Desde sus casas, gran parte de la población vivió el rescate de los atrapados a través de la programación de Radio Televisión Dominicana, y afligidos, se mantenían a la expectativa por no saber si entre los muertos podía haber parientes, amigos o conocidos.

Entre las víctimas de este lugar y más conmovedores de casos figura el urólogo, Eduardo Cabrera Castillo, de 68 años, general retirado la Policía y exdirector del hospital General Docente de Radio Patrulla.

El galeno regresaba del aeropuerto de Las Américas a donde había ido a buscar a unos amigos cuando la pared colapsó, siendo el primer vehículo impactado por uno de los bloques de concreto mientras conducía una yipeta gris, la última en ser levantada de entre los escombros, según las autoridades.

Parte de las placas de hormigón que colapsaron bajo la presión pluvial de las lluvias del sábado.

Relación familiar
“En el transcurso de la tarde su esposa Marilyn trató de comunicarse con él, pero el intento fue infructuoso”, comentó escuetamente Miguel Eduardo Caba, presidente de la Sociedad Dominicana de Urología. Lo definió desde el punto de vista gremial como muy afable, todo un caballero, de muy buen estado anímico y muy divertido.

Otro de los casos que llamó la atención fue del comerciante Omar Alejandro Méndez Aviles, de 70 años, y su hija, la arquitecta Solange María Méndez, de 31 años, quienes estaban en una consulta odontológica en Gascue.
Al retornar bajo el fuerte aguacero a bordo de una yipeta Ford Explorer, les cayó parte de la pared de concreto que delimitan el túnel.

Solange se había casado el 30 de septiembre en la Iglesia de Las Mercedes, según el diácono José Rivas, de la Parroquia Divino Niño, quien participó en la ceremonia matrimonial y mantiene una relación de 30 años con la familia, la cual dijo es arraigada a los valores, muy generosa, y con la que se reúne siempre.
A Omar les sobreviven su esposa Solange Monegro, un niño extraordinario, así como un varón casado, quien reside en Estados Unidos.

Los demás muertos en el desnivel fueron identificados por la Policía como el haitiano Boniel Dovielie de 40; Ramón Martínez Cesani, de 75; Awilda Vásquez Burgos, de 65; María Nereyda Martínez Vásquez, de 31; Michell Orsoco, de 29, Ramón Antonio Martínez Sesani, de 75, estadounidenses; Nadege Joseph de 33, puertorriqueño, Maicor Osoria, de 29 y una haitiana.

Situación vial

— Evaluaciones
Desde este domingo, brigadas de Obras Públicas trabajaban afanosamente para rehabilitar el paso por el desnivel. Conductores como el doctor Alberti Estrella abogan porque los organismos supervisen y den mantenimiento a las estructuras.

Fallecidos a nivel nacional por lluvias

Más víctimas.
El disturbio meteorológico también cobró la vida de Gregorio Salvador Castillo Ortiz, arrastrado por las aguas de Arroyo La Vaca, de San José de Ocoa; Juan Emilio, Carlita y María del Socorro Luciano, fueron arrastrados por las aguas acumuladas en Las Colinas de Manoguayabo, al igual, Luis Enrique Silvestre Fernández, en el mismo sector.
También Ramón Miguel Rijo, en el sector Villa Cerro, de Higüey, y Anabel Núñez Jiménez, en la provincia La Altagracia, arrastrados por las aguas acumuladas.

Otros fallecidos fueron Domingo Andrés Jiménez González en la Carretera de Manoguayabo por las innundaciones. Daritza María Figuereo Morel por inundaciones, Manoguayabo, en Santo Domingo Oeste; Luis Felipe Lucian, Daxiani Pérez en el callejón Héctor Pérez de la Zurza, en el Distrito Nacional, y el haitiano Witberson Francais, quien fue arrastrado por las aguas de la cañada del Barrio Norte.

Según la Defensa Civil, Samuel y Altagracia Figueroa, hermanos, su fallecimiento obedeció al deslizamiento de una pared, en Villa Colina de Santo Domingo Oeste.