Dentro del PLD hay muchos sectores que temen una guerra campal en la reunión del Comité Central convocada para el próximo 27 de octubre, en la que se deberá decidir si los candidatos de ese partido para las elecciones de 2020 se elegirán mediante primarias abiertas o primarias cerradas.
Sin embargo, se sabe que los tambores podrían quedar resonando, pues los seguidores de Leonel Fernández podrían llegar al campo de batalla con la intención de tocar retirada antes de que suenen los tiros.
El conteo da claramente un dominio de la corriente del presidente Danilo Medina, que es quien promueve las primarias abiertas.
Entonces, gente de las que hablan de cerca con Leonel Fernández entienden que se deben proponer las primarias cerradas solo para cumplir, y recogerse sin mayores ruidos en caso de que se impongan las abiertas.
El grupo de Medina no se duerme, y desde ya está llamando a su gente para dejar claro que la línea es votar por primarias abiertas y evitarle una derrota política al Presidente de la República. Sus movimientos parten de que aunque una derrota es poco probable, con la gente nunca se sabe.
Aunque el denominador común entre los peledeístas es la desconfianza y la indefinición, los miembros del Comité Central y del Comité Político sí saben por dónde tienen que moverse, pues la lealtad a los grupos impera más allá que el razonamiento político personal. Los de Leonel simplemente votarán por cerradas y los de Danilo por las abiertas.