El alza de varios rubros agrícolas producto de la sequía comenzó a sentirse en el Índice de Precios al Consumidor, al arrojar un incremento global de 1.10% en el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas que monitorea el banco Central.
El informe de la entidad financiera revela que esas variaciones influyeron en que el IPC de julio cerrara en 0.24%, lo que ubicó la inflación acumulada de este en 0.85%.