La historia de Luciano Quiroga, conocido por su nombre artístico Luqiano, es una narrativa de perseverancia, sueños y pasión por la música.
Desde las calles de Olavarría, provincia de Buenos Aires, hasta el vibrante bullicio de Miami, en los Estados Unidos, la vida de Luqiano se despliega como un testimonio de un artista que cruzó fronteras para forjar su destino en el mundo de la música latina.
Desde muy joven, Luciano se sintió atraído por el mundo de la música. Creciendo en una familia donde los ritmos latinos eran el pan de cada día, no tardó en descubrir que su destino estaba ligado a las melodías y los escenarios.
A la temprana edad de cinco años, ya se encontraba explorando el mundo de la percusión, un talento que no pasó desapercibido para su entorno.
No obstante, fue su voz la que finalmente le definiría como artista, llevándolo a estudiar técnica vocal y a experimentar con diversos instrumentos, aunque siempre volvía a su primer amor: la percusión.
El difícil proceso
La transición de Luciano, desde ser un prometedor músico en Argentina a convertirse en Luqiano, un artista emergente en Estados Unidos, comenzó atraído por la promesa de un concurso que buscaba lanzar a las próximas estrellas de la música latina.
Viajó a USA y se enfrentó a una realidad mucho más dura: una estafa que lo dejó varado en un país desconocido, en el umbral de una pandemia global.
«Fui contactado por redes sociales por un productor musical de renombre, hasta que hice un pago que exigía esta gente para entrar al proyecto. Todo terminó siendo una gran mentira», recuerda Luqiano.
«Lo más duro fue que el dinero que me quitaron no solo era mío, sino también de amigos que me ayudaron a reunirlo porque confiaban en mi talento. Fue una desilusión para ambos lados», cuenta en una entrevista.
«Me vi obligado a pasar unos días en la calle,» dijo. Un grupo de boricuas, conocidos en los estudios de grabación, se convirtieron en su nueva familia, ofreciéndole apoyo y un lugar donde reconstruir sus sueños.
Hoy, Luqiano no solo ha superado las adversidades sino que también ha comenzado a materializar su visión de llevar la cumbia a un escenario global.
