Santo Domingo.-Santiago, Punta Cana y el Distrito Nacional son los principales destinos del país que experimentan un crecimiento exponencial en el alquiler a corto plazo, lo que a su vez incide en un aumento de precio de las vivienda para renta familiares.

Las unidades que se están desarrollando en las zonas céntricas están enfocadas al público de renta corta, mientras que los nuevos núcleos familiares se ven obligados a salir a las afueras de la ciudad, explicó el presidente de la Asociación de Agentes y Empresas Inmobiliarias (AEI), Alberto Bogaert.

Apuntó que ese auge viene de la mano de varios factores, entre ellos el costo de los terrenos en las zonas urbanas .
“El costo de los terrenos obliga a los desarrolladores e inversionistas a construir unidades cada vez más pequeñas y a la vez existe una alta demanda de ese tipo de propiedades, ya que son inversiones a las que se les puede ganar mucho más recursos que las de las rentas largas”, subrayó.

Indicó que en este último caso quienes las alquilan son familias y necesitan precios asequibles, por tanto las unidades que se destinan a estas son las que están ubicadas en las periferias.

Detalló que en las zonas que se están desarrollando los proyectos familiares es por la Jacobo Majluta, la Independencia, San Isidro y la periferia de la ciudad.

La mayor rentabilidad se debe a que la renta es regularmente en dólares, que por lo general son precios que varían según la temporada, detalló. También en este tipo de proyecto destinados a renta corta existen unidades a renta larga, pero están destinadas a extranjeros que trabajan en multinacional o organismos internacionales.

Impacto
Ese auge de renta corta si bien es cierto que eleva la oferta habitacional para los visitantes, obliga a los residentes de estas ciudades a vivir en las periferias.

Un ejemplo de eso lo está pasando Deni Hidalgo, de 32 años y su esposa llevan tres meses buscando una vivienda de dos habitaciones en el centro de la ciudad para vivir junto a su hijo de un año y seis meses.

“Estamos buscando un apartamento en la zona metropolitana con dos parqueos, pero no encontramos a precios asequibles”, dijo al detallar que el deseo de mudarse se ha convertido en una odisea.

“Ahora vivimos por la avenida Jacobo Majluta y tenemos que cruzar a la ciudad y pasar hasta horas en un embotellamiento de tránsito”, lamentó.

Otra que también pasa por esa situación es Luz Castillo, de 37 años, residente en San Isidro. Cuenta que lleva varios meses buscando apartamento de dos habitaciones y sólo encuentra de una. Sumado a que están ubicados en zonas donde no hay parqueos y que existe una gran concentración de negocios e industrias.

Servicios

— Desafíos
El auge del turismo inmobiliario requiere de mayor inversión pública y demanda de servicios básicos, ya que esos proyectos suponen una mayor demanda de energía, agua y recogida de basura, pese a que son usuarios de paso.