Bloomberg News.-Es probable que el yuan, que ha caído 5 por ciento desde que el banco central de China devaluó la moneda en agosto, tenga que debilitarse otro 14 por ciento para que la economía del país tenga beneficios reales.
Una declinación a 7,7 por dólar, respecto de alrededor de 6,6, es necesaria para impulsar la expansión del producto interno bruto 0,7 puntos porcentuales, según estimaciones de Bloomberg Intelligence Economics.
La decisión, una posibilidad que no espera ninguno de los analistas que ha consultado Bloomberg, derivaría en una salida de capitales de US$670.000 millones.
El truco para los funcionarios chinos es lograr debilitar la moneda sin desencadenar un éxodo masivo de capitales del país.
La declinación de las exportaciones chinas es sobre todo consecuencia de la vacilante demanda global, y un derrumbe del yuan no haría más que aumentar el riesgo de devaluaciones competitivas en los países vecinos, lo que generaría una llamada guerra cambiaria.
“No quieren una excesiva devaluación”, dijo Sacha Tihanyi, estratega de mercados emergentes de Toronto Dominion Bank en Nueva York. “No creo que estén tratando de obtener algún tipo de ventaja exportadora por medio de la devaluación de la moneda”.
El yuan declinó el jueves en Shanghái al nivel más bajo en cinco años -6,5956 por dólar- luego de que el banco central redujera la referencia, lo que extendió la caída de los últimos 12 meses a 5,7 por ciento.
El Banco Popular de China interrumpió el viernes una serie de ocho días de rebajas de su paridad de referencia y mantuvo la paridad cambiaria externa con escasos cambios.
La brecha con el nivel interno era de 1,4 por ciento. Se amplió a un récord de 2,9 por ciento el jueves antes de reducirse en un contexto de presunta intervención.