SANTO DOMINGO.-El porcentaje de donantes voluntarios de sangre en República Dominicana ha rondado el 1 %, llegando en ocasiones cerca de un 2 % en ocasión del Día Mundial del Donante de Sangre, pero tras la llegada del Covid-19 esa cifra se ha reducido casi a nada, debido a las limitaciones de movilidad que ha significado la enfermedad viral.
La encargada administrativa de la Cruz Roja Dominicana, Lucresia Rosario, explicó que previo a la pandemia solían recibir a instituciones del Estado y centros educativos, los cuales motivaban a sus internos a donar. “Tras la pandemia, eso desapareció totalmente, y en estos momentos estamos muy por debajo de los límites deseados”, dijo Rosario.
Explicó que el Covid-19 también ha incidido en el incremento de la cantidad de sangre rechazada tras registrarse un aumento anormal en la cantidad de glóbulos blancos en sangre de la población.
Estos datos son ratificados por el doctor Pedro Sing, director del Hemocentro Nacional.
“Las donaciones suelen ser por reposición, es decir, cuando algún familiar o amigo del paciente dona sangre. En el país la donación por reposición alcanza un 15 %, mientras que voluntaria, menos del 1 %”.
Sing agregó que la media de donantes al año es de 70,000 unidades, lo que hace acumular un déficit anual de 300,000 pintas.
Los números
De 68,283 personas que fueron evaluadas para donación en la Cruz Roja de enero a noviembre de este año, fueron descartados 24,896 personas.
De los 43,387 que sí fueron sangrados, solo pudieron ser despachadas 40,780 pintas de sangre.
El hematólogo César Matos, director del Banco de Sangre de la Cruz Roja, declaró que debido a la carencia de sangre de voluntarios, muchas personas cuando acuden se chocan de frente con la realidad de que necesitan conseguir donantes.
“Hay países del área como Ecuador, Honduras, El Salvador y Nicaragua que tienen su problema de donación de sangre resuelto. Eso se debe a que son países que han estado en conflictos y se vieron en la necesidad.
Pero nosotros no tenemos por qué esperar un conflicto bélico para aprender a donar sangre. Insisto en que tenemos que lograr que la gente done sangre en tiempos de paz. Para eso se requiere de una campaña permanente de parte de las autoridades y de todas las instituciones”, dijo Matos.
El tamizaje
Matos citó entre los requisitos para expedir sangre el llevar una indicación médica, un donante en buenas condiciones de salud, el cual a su vez se someterá a un chequeo médico y finalmente pagar una cuota de recuperación.
“Cuando la sangre se recibe se le hace todos los procesos virológicos. Ninguna sangre puede salir inmediatamente después de ser recibida, se requiere de al menos 72 horas y 48 horas, si es muy urgente”, indicó Rosario.
A ese proceso le denominan tamizaje, e incluye analíticas de Hematitis B y C, VIH y de otras afecciones virales.
Según Matos, dicho proceso tiene un costo de RD$2,400 por unidad con el subsidio de la entidad, ya que de lo contrario resultaría más costoso.
Entre las prestadoras de servicios de ARS solo el Senasa cubre el proceso de tamizaje.
Sing informó que a partir del próximo año, las demás prestadoras sumarán dicho proceso al catálogo de servicios.
Promoción constante
El gobierno aspira a establecer la sangre como un bien público. El personal vinculado con la transfusión coincide en señalar que se necesita crear una campaña permanente en el país hasta tanto se cree una cultura de donación.
La meta inicial es de un 5 % de la población dominicana y la aspiración final es de un 20 %. Con ese porcentaje se estima no habría necesidad de sangre ante una urgencia.
Resultados
— Rechazada
Según el doctor Pedro Sing, director del Hemocentro Nacional, el 54.5 % de la sangre donada es diferida luego de obtenerse los resultados de la analítica que se le realiza a la misma.