SANTO DOMINGO.– Las recaudaciones de sangre experimentan una baja entre un 60 y un 70% este año, tanto por donación voluntaria como por reposición, debido a la paralización de los servicios de salud y la disminución de la demanda por la situación del COVID-19.

En el país las pintas que se colectan cada año, que son unas 115 mil, no cubren la demanda actual que ronda las 300 y 350 mil unidades, generando un déficit de más de 200 mil.

De acuerdo a Arelis Medina, directora del Servicio de Sangre de Salud Pública, la situación puede ser amenazante de persistir la baja posterior a la reactivación de los servicios de salud, principalmente las cirugías electivas demanda la mayor proporción.

Destacó que pese a la carencia la situación se mantiene bajo control, ya que no se han presentado emergencias de gran envergadura que ameriten un uso excesivo de la misma.
A propósito de celebrarse ayer El Día Mundial del Donante de Sangre, la doctora exhortó a la población a vencer el miedo al contagio por el coronavirus al acudir a loscentros de donación, ya que en los mismos se les garantiza las medidas de protección.

“Constantemente nos mantenemos orientando a la población para que mantengan la cultura de donar sangre, la cual ha mermado por la situación del virus, pero hemos dados garantías de protección, tanto al donante como el receptor”, puntualizó.

Unos de los bancos que aporta más del 50% de la sangre utilizada en el país es el de la Cruz Roja Dominicana, que recibe aproximadamente 300 personas diarias que donan. El centro dispuso todas las medidas de seguridad en sus instalaciones frente a la pandemia del coronavirus, para garantizar protección.