La tormenta tropical Melissa, desde tempranas horas del 23 de octubre de 2025, generó precipitaciones torrenciales que afectaron el municipio de Baní, provincia Peravia, la cual fue declarada en alerta roja por el Centro de Operaciones de Emergencia (COE).
La Circunvalación de Baní, importante infraestructura de conectividad vial para los pueblos del sur del país, construida en una extensión de 19.8 kilómetros, para un total de 39.6 kilómetros lineales en ambos sentidos de circulación y con 17 puentes, sufrió daños a causa de las fuertes lluvias. Estas provocaron agrietamientos en 45 metros lineales el 27 de octubre de 2025, en el borde del carril de paseo, próximo a la entrada del distrito municipal de Galeón, ocasionando un deslizamiento de tierra en el talud de protección.
El ministro de Obras Públicas, ingeniero Eduardo Estrella, informó el lunes 28 de octubre de 2025, durante el acostumbrado encuentro del presidente Luis Abinader con la prensa, “La Semanal con la Prensa”, que se trató de una pequeña apertura de 45 metros de largo y que esos taludes se protegen con una planta llamada vetiver, que forma amarres con sus raíces.
Agregó que, en esa zona específica, la raíz no había prendido bien por falta de tiempo, y debido a las aguas torrenciales se produjo ese pequeño percance, pero que no era una situación mayor de preocupación.
El criterio de las actuales autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones de no usar hormigón armado en el revestimiento, debido a su alto costo, llevó a la alternativa de emplear el pasto vetiver para estabilizar el talud. No obstante, estas raíces pueden crecer verticalmente hacia abajo hasta 1.5 metros, y en zonas de ríos secos su crecimiento es muy lento.
Sumado a esto, en un talud de 8 metros de altura, es muy difícil controlar la presión hidrostática, lo cual se considera una de las causas del desplazamiento del talud.
La afirmación de que hubo errores en el diseño y de que el relleno estaba compuesto por materiales arcillosos mal compactados, sin ningún análisis ni estudios profundos, es absurda y especulativa, dado que el relleno utilizado en esta circunvalación no es de arcilla.
No existen tuberías de agua potable en esta vía; por tanto, no hubo ruptura de tuberías.
Es importante señalar que la Constructora Ingeniería Estrella ejecuta sus proyectos con altos estándares de calidad.
El destacado ingeniero geólogo y máster en Ciencias Geológicas por la Universidad de la Amistad de los Pueblos de Moscú, Heliodoro Ramírez, afirmó que “la causa de los fallos en el último tramo de la Circunvalación de Baní se produjo por una híper saturación de agua durante este periodo lluvioso, lo que indujo un proceso de consolidación del relleno en la base del talud. Este proceso provocó una migración de las fracciones más finas del relleno, rompiendo la cohesión del talud y produciendo ciertos niveles de desestabilización, reflejados en los agrietamientos observados en el área del pavimento”.
Ramírez destacó que en la Circunvalación de Baní existía un riguroso control de calidad, donde se realizaban pruebas a los materiales y a su compactación.