El fin de semana pasado el alcalde de Santiago, Abel Martínez, estuvo por Jarabacoa y no precisamente veraneando.
Estaba haciendo amarres tempranos para un proyecto presidencial que ya fue anunciado en vallas que, pese a su efímera duración, cumplieron el cometido de dejar ver sus intenciones.
En una villa de Jarabacoa tuvo una entusiasta reunión con un grupo de diputados, incluyendo al vocero de la bancada del PLD, el fogoso Gustavo Sánchez.
Dejarse ver
Para eliminar cualquier duda, varios de los diputados que participaron hicieron pública la reunión y se pusieron “donde los medios los vieran” para que se supiera del encuentro sin que se tuviera que producir una nota oficial. Uno de los participantes es un activo “influencer”, Bolívar Valera (El Boli), que junto a Gustavo Sánchez y otros contertulios se desplazaron hasta la avenida de la Confluencia para juntarse en el restaurant que es la novedad en la ciudad, el “Serie 50”, donde, además de platos sobre la base de chicharrón, saborearon lo que parece ser un intenso inicio del proyecto presidencial de Abel Martínez.
Congreso del PLD
Aunque muchos han criticado al alcalde Abel Martínez por entender que debió esperar que pasara el Congreso del PLD, que está en curso, se impuso la teoría de que “al que madruga Dios le ayuda”.