U.S. Secretary of State John Kerry speaks to members of the media in Phnom Penh, Cambodia, Tuesday, Jan. 26, 2016. Kerry is in Cambodia on the fourth leg of his latest round-the-world diplomatic mission, which will also take him to China. (AP Photo/Jacquelyn Martin, Pool)
Washington.- El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, viajará pronto a Cuba para potenciar el diálogo sobre derechos humanos, el tema más espinoso en la nueva relación, y allanar el camino para la visita de Barack Obama en un momento de fuertes críticas republicanas sobre la represión en la isla.
Kerry, que en agosto pasado se convirtió en el primer secretario de Estado en visitar Cuba en 70 años, dijo esta semana que podría regresar a la isla “en una semana o dos, para tener un diálogo de derechos humanos».
El anuncio llega poco después de que la Casa Blanca anunciara que Obama viajará a Cuba los días 21 y 22 de marzo, y es sorprendente por el hecho de que Kerry decida asumir el liderazgo de un diálogo que hasta ahora había encabezado uno de sus subordinados, el subsecretario de Estado Tom Malinowski.
“Enviar a Kerry para liderar la delegación estadounidense en el diálogo sobre derechos humanos en La Habana demuestra la importancia que el presidente Obama da a ese tema”, dijo a Efe un experto en Cuba en la American University, William LeoGrande.
Para Michael Shifter, presidente del centro de estudios Diálogo Interamericano, la visita de Kerry refleja un deseo de “apaciguar a aquellos que exigen una posición más fuerte en este asunto».
En cuatro audiencias ante el Congreso esta semana, varios legisladores republicanos presionaron a Kerry para que citara avances en derechos humanos en Cuba, denunciaron que la situación ha empeorado desde el establecimiento de relaciones diplomáticas y criticaron que Obama planee viajar a la isla a pesar de ello.
Según la disidente Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), en enero hubo al menos 1.414 detenciones por motivos políticos en la isla, una de las cifras mensuales más altas de la última década.
“Me gustaría ir al mismo oculista que usted, porque las gafas de color de rosa (con las que mira a Cuba) son increíbles”, espetó a Kerry el jueves la congresista republicana de origen cubano Ileana Ros-Lehtinen, que denunció los “masivos arrestos” en la isla.
Su compañero de partido Mario Díaz-Balart recordó el miércoles que, en una entrevista con el portal Yahoo el pasado diciembre, Obama dijo que no tendría sentido visitar Cuba si ese país va “hacia atrás” en cuanto a las libertades para el pueblo cubano.
“Y bajo cualquier medida objetiva, el régimen de los Castro no ha mejorado su historial de derechos humanos”, subrayó el congresista.
Según LeoGrande, sin embargo, “la atención de alto nivel que se le está dando al diálogo sobre derechos humanos” que encabezará Kerry “es la forma que tiene la Administración de refutar las críticas” de que ha “ignorado” ese área en el proceso de deshielo.
Esta sería la primera ronda formal del diálogo de derechos humanos, después de una reunión preliminar en marzo de 2015 en Washington que se limitó a definir la metodología y la estructura de la conversación bilateral sobre el tema.
“Sin duda, Kerry hablará sobre las cosas que Cuba podría hacer en el área de derechos humanos para ayudar a que el viaje del presidente (Obama) sea lo más exitoso posible”, opinó LeoGrande.
Según Shifter, “aunque Cuba está avanzando muy despacio en derechos humanos” y “todavía está arrestando a disidentes”, La Habana “está enviando algunas señales alentadoras, como el reciente anuncio de visas” para que siete expresos políticos “puedan viajar una sola vez fuera del país».
Félix Navarro, uno de esos siete expresos, dijo a Efe en La Habana que rechazará esa concesión del Gobierno cubano y la atribuyó a “una estrategia” relacionada con la visita de Obama a la isla.
Un portavoz de la Casa Blanca, Pete Boogard, aseguró a Efe el jueves que la concesión de visados es una buena noticia, aunque pidió a las autoridades de la isla que extiendan esa autorización a otros cuatro exprisioneros que no la han recibido.
Kerry también lamentó esta semana que Cuba volviera a arrestar a cinco de los 53 prisioneros políticos liberados como parte del acuerdo con Estados Unidos para restablecer las relaciones diplomáticas.
“Creemos que serán liberados” pronto, aseguró Kerry en una audiencia en la Cámara de Representantes estadounidense.
Pese a ese panorama, LeoGrande ve “avances” en derechos humanos como el inicio de “un debate entre la sociedad civil sobre el futuro económico y político de Cuba”, la expansión del acceso a internet, y la tolerancia de La Habana hacia el crecimiento del sector privado.
Según Shifter, Obama quiere “aprovechar este momento para alentar avances en derechos humanos, pero sin coaccionar».
“Esto requiere paciencia, contención, y la cabeza fría. Si Obama fuera muy crítico con la lentitud del Gobierno cubano en el asunto, toda su estrategia se derrumbaría y podría ser contraproducente”, apuntó a Efe Shifter.